Trilogy reportó un resultado neto negativo en 17,3 millones de dólares entre enero y marzo, lo que significa que multiplicó por casi seis veces la pérdida de 2,9 millones de dólares informados en igual período anterior. La compañía advirtió que por el contexto sanitario derivado del Covid-19 sus proyectos de inversión fueron modificados, al tiempo que aplazó los gastos operativos no esenciales y canceló dividendos.
La operación de Bolivia, bajo la marca Viva, no generó buenas noticias en el primer trimestre. El total de ingresos locales cayó 19,8 por ciento hasta 44,1 millones de dólares. Esto como consecuencia de una baja de 19 por ciento en el apartado servicios y una reducción de 36 por ciento en equipos. Bolivia aportó el 28,8 por ciento de las ventas totales de la compañía, que también tiene presencia en Nueva Zelanda.
El Ebitda para la filial en Bolivia cayó un 65 por ciento, de 14,2 millones de dólares a cinco millones de dólares. El margen pasó de 27,2 por ciento a 11,8 por ciento. El Capex local cayó 44 por ciento hasta 2,4 millones de dólares. Las inversiones totales de la firma se ubicaron en 16,1 millones de dólares, también menores que lo informado un año atrás.
En términos de usuarios, Viva Bolivia cerró el trimestre con 1,7 millones de líneas móviles frente a las 2,01 millones con las que contaba antes. El segmento pospago se redujo siete por ciento hasta 309.000 líneas al tiempo que el prepago cayó a 12 por ciento hasta 1,4 millones. El ARPU cerró en 7,6 dólares como resultado de 20,6 dólares de promedio para pospagos y 4,5 dólares para prepagos.