Vivo continúa desarrollando nuevas soluciones de Internet de las Cosas (IoT). La compañía anunció un acuerdo con Dow Brasil para fortalecer la seguridad en el entorno industrial. La operadora brindará soluciones basadas en dispositivos inteligentes y una plataforma en la nube que permitirá diseñar estrategias de prevención de accidentes como parte de su política orientada a transformar la seguridad laboral. La digitalización también habilita mejores prácticas en este segmento.
La filial brasileña de Telefónica viene desarrollando soluciones para distintos verticales a partir de las diversas tecnologías disponibles que está en condiciones de proveer. La actividad industrial que se desarrolla en Brasil es un terreno ideal para explorar con nuevas soluciones, como la implementada en la planta que Dow posee en Jundiaí, en el interior de San Pablo. Allí puso en marcha la solución llamada Area Segura.
¿De qué se trata Area Segura? Es un servicio que funciona mediante la integración de TAG (dispositivos portátiles instalados en equipos o usados por los empleados) y de CORE (unidades que gestionan la proximidad y automatización en tiempo real). Estos dispositivos se conectan a una plataforma de gestión centralizada en línea que permite el registro de personas y máquinas, el establecimiento de reglas de negocio y la generación de informes analíticos, paneles de control y alertas instantáneas.
Esta combinación permite reducir accidentes, como tropezones y caídas menores, hasta evitar choques entre máquinas o que se produzcan, inclusive, incidentes con cargas suspendidas. Por eso ambas compañías aseguran que se incrementa la seguridad operacional.
La ventaja de esta solución de IoT es que emite alertas sonoras y visuales ante cualquier riesgo, sea que una persona se acerque mucho a una máquina cuando no corresponde o ingresa a una zona restringida, lo que incrementa tanto la seguridad tanto física como la informática.
Otra característica de esta solución es que “permite la automatización inteligente, como la reducción de velocidad o la detención completa del equipo, ajustada según la proximidad entre los TAG y los CORE”, tal como lo expresó la operadora a través de un comunicado.
Una primera consecuencia interesante de esta implementación es que como las tasas de lesiones y eventos accidentales son bajas, para mejorar el rendimiento se avanzó en otros aspectos que no tienen que ver de manera directa con la conducta de las personas. ¿Hacia donde fue? Se incluyeron soluciones que optimizaron la ejecución del trabajo y que, inclusive, eliminaron tareas que pondrían en riesgo la seguridad de los empleados.
La protección de proximidad es un ejemplo ya que la tecnología lanza alertas a quienes están manejando equipos cuando advierten que una persona se encuentra en un punto ciego cercano.
La gestión centralizada de esta plataforma de IoT delimita las áreas seguras, de riesgo y de monitoreo además de mejorar la seguridad en la interfaz entre personas y máquinas. A esto se suma la ventaja de ser una solución flexible y adaptable a los distintos entornos dentro de la empresa. Por eso esta primera implementación, que servirá de prueba piloto, también se instalará en otras plantas de Dow con los mismos objetivos: subir la seguridad operacional a partir de una gestión automatizada y más eficiente.
El ecosistema IoT está integrado por una amplia variedad de dispositivos que van desde pulseras como TAG hasta señales visuales y sonoras, y demás accesorios complementarios interconectados entre sí que operan en favor de la seguridad operacional.
Vivo se mantiene muy activo en el desarrollo de soluciones para resolver distintas problemáticas dentro de las organizaciones. En los últimos meses implementó redes dedicadas 5G en distintos estadios para resolver los cuellos de botella de conectividad ante las grandes concentraciones de público. Considerado el operador de red 5G más veloz del mundo, aprovecha esa caracterización para concretar implementaciones destinadas a generar nuevas fuentes de ingresos y monetizar su portafolio de servicios.
Esa determinación parece estar rindiendo sus frutos puesto que la operación de Brasil es una de las más eficientes en términos de facturación para Telefónica, en franca huida de América latina.