COBERTURA ESPECIAL – El Ministerio de Ciencia, Innovación, Tecnología y Telecomunicaciones (Micitt) acaba de firmar los contratos de concesión para inaugurar la era de 5G en Costa Rica, con espectro dedicado para tal fin. Hubert Vargas, viceministro de Telecomunicaciones, conversó con TeleSemana.com sobre este proceso al que valoró “difícil, porque comenzó con una tensión inicial, heredada por la administración anterior con el regulador”, algo que se pudo revertir a través del trabajo conjunto y la apuesta por el consenso.
Pero no sólo eso. La subasta también cambió la configuración del mercado de telecomunicaciones, al introducir nuevos actores, el rol de las tecnologías de acceso fijo inalámbrico (FWA, por sus siglas en inglés) en la estrategia de achicamiento de la brecha digital. En adelante, y tras concluirse una subasta de recursos para el sector audiovisual, el país ofrecerá una nueva licitación específica para redes privadas -texto que ya fue ofrecido a consulta pública-, a la vez que se avanza en la unificación nacional de los criterios de despliegue de infraestructura.
Todo esto sucede en pleno proceso electoral: el primero de febrero de 2026, la población local asistirá a las urnas para elegir presidente y diputados. Por eso, este logro cimenta días de balances y de debates en el sector, a partir de un requerimiento del Ministerio de Hacienda a los operadores de obtener información de sus clientes.
Del consenso y las configuraciones
No es la primera vez que Vargas valora la apuesta conjunta entre el Ministerio y la Superintendencia de Telecomunicaciones (Sutel), que posibilitó el desarrollo de este proceso de licitación. “Nos pusimos de acuerdo en lo esencial, pero también en temas que van a potenciar el desarrollo rural del país, porque el diseño de esta subasta va a impactar de manera muy rápida a 134 distritos que estaban nulamente conectados, o muy poco conectados” dijo el funcionario y recordó que la apuesta se inspiró en el modelo brasileño, “de subsidiar el despliegue de la infraestructura y abaratando el costo del espectro, pues nos parece que los resultados son realmente positivos”.
“Valió la pena ponerse de acuerdo con Sutel y priorizarlo, ha sido el proyecto estrella del Micitt. Así nos lo asignó el presidente al ministerio y ofreció buenas noticias porque se dio una configuración del mercado, distinta a la que proyectamos”, admitió el funcionario quien confesó, además, la sorpresa que significó recibir el interés de cinco cooperativas para los despliegues regionales: “no pensábamos que iban a haber tantos pequeños operadores en la fase 2”.
“Son buenas noticias porque son operadores que no vienen a competir necesariamente con los grandes, sino que vienen a complementar vacíos en la cobertura que, a pesar de que Costa Rica es muy pequeña, teníamos retos pendientes en última milla”, sostuvo. Precisó que las cooperativas adelantaron a la cartera que van a priorizar el despliegue de esa última milla con soluciones de acceso fijo inalámbrico; sobre todo, en lugares en los que les resulta muy costoso desplegar redes de fibra óptica.
“FWA va a ser una solución para muchas familias que pueden pagar conectividad y que, por un tema de infraestructura, aún no le ha llegado”, apostó y reconoció que “este trabajo se complementa con el que estamos haciendo con las municipalidades”.
En muchos casos, en muchas latitudes, la normativa municipal de despliegues de tendidos de telecomunicaciones se contradice con lineamientos nacionales y Costa Rica no es la excepción. Por ello, el Micitt trabajó en el territorio y visitó a 51 municipios en un año (de los 84 existentes) para acordar criterios comunes para los despliegues. “Seguimos trabajando entendiendo que la prioridad del desarrollo tiene que darse principalmente en las zonas rurales, que es donde el Estado tiene que intervenir. No es que en las zonas urbanas sea más fácil pero sí que va más en automático”.
Se trata del Decreto 44335, que es un reglamento que la cartera promocionó en 51 municipios y donde logró que 38 lo ratificaran. Esta medida “unifica los criterios técnicos para el despliegue de infraestructura de telecomunicaciones, para la construcción de infraestructura. Antes había 84 realidades en Costa Rica y hoy ya tenemos a 38 municipios que están bajo la misma realidad o haciendo una Ley, que fue fomentada por un ex viceministro”, dijo Vargas y subrayó la importancia de conservar las estrategias públicas de transformación digital, más allá de la propia gestión de gobierno.
“El Estado tiene que tener un norte, una visión, no de cuatro años del gobierno, sino de 10 o 15 años, del hacia dónde queremos llevar al país y me parece que, este decreto fue un gran logro de la administración anterior al que tuvimos que darle continuidad, redactar y emitir el decreto”, sinceró.
Ya se firmaron todos los contratos, menos uno
En el mediodía de Costa Rica de este miércoles, la cartera firmó los contratos de concesión con operadores que tienen diferentes envergaduras y trayectorias, como también obligaciones y expectativas. Estas firmas involucraron “la última fase de la formalización de los contratos, que es ante la Contraloría General de la República”, algo caracterizado por el funcionario como “lo último que falta para que ya entren a regir las obligaciones y por ende ya puedan utilizar el espectro”. El banderazo dependerá de la velocidad de respuesta de la Contraloría, pero no demoraría más de 25 días hábiles.
A la hora de repasar el proceso, el funcionario subrayó el acompañamiento a todos los operadores, pequeños y grandes: “Los pequeños eran totalmente nuevos en esto y tuvimos muchas sesiones, uno a uno, pero también grupales” dijo y celebró que “las cooperativas se llevan muy bien entre ellas y conversábamos, no temas de mercado o de competencia, sino de trámites, de asesoramiento legal, de asesoramiento en cómo realizar el pago de la garantía y otros. Fue multisectorial”.
Vargas también subrayó que se trató de un proceso que involucró a los operadores, a sus equipos técnicos y legales, pero también a los bancos, que tuvieron que involucrarse porque para muchos de estos actores, el tema de las garantías fue un desafío nuevo y adicional.
De todos, un solo operador desistió a mitad de camino. Se trató de la cooperativa eléctrica Alfaro Ruiz, que había participado de la subasta y que, luego abandonó. “En las notas que nos enviaron nos indicaron que fue por un tema financiero, que probablemente planificaron mal el proyecto y pues lo lamentamos, pero más bien nos parece que el acercamiento nuestro les ayudó a visualizar que tenían que recalibrar sus números para ojalá una próxima oportunidad”, explicó el viceministro. Detalló que esto no significó ningún tipo de penalidad para la cooperativa porque la normativa no lo previó asi, como tampoco lo plantea la ley de contratación pública.
La consecuencia directa de esta cancelación fue que 18 radiobases, de las 3.304 radiobases que se lograron colocar para el despliegue de infraestructura en este cartel de licitación, quedarán sin colocar en primera instancia.
“Esto afectó un poco el proceso, porque no sólo se perdieron las manos y horas de colaboración del Ministerio y de la Subtel, sino también la configuración del espectro, que fue diseñada considerando a Alfaro Ruiz. Al salirse, afectó la colocación de las bandas de espectro y ese tema se está considerando entre las dos instituciones para reconfigurarlo de la mejor manera”, dijo Vargas.
Una posibilidad de solución posible pasa por poner a disposición ese bloque con esa cooperativa que había mostrado interés en el proceso y que había pujado con Alfaro Ruiz, pero aún se están ultimando esos detalles a posteriori de esta firma de concesiones, porque es la primera vez que pasa.
Habrá más espectro IMT
El Micitt quiere que el país adopte un nuevo timing en materia de subastas espectrales, no esperar que pasen cuatro o cinco años entre una y otra. “Estamos pensando que la situación del mercado de telecomunicaciones requiere cada vez más movimiento en materia de espectro disponible. Inclusive, porque hay espectro que deja de ser tan atractivo como, por ejemplo, la banda 2600 MHz, que hace dos años era más atrayente que ahora y sólo pasaron dos años. En ese nivel de cambio tecnológico estamos y las licitaciones tienen que ser más flexibles”.
Imagen creada con IA
Y aunque aún no se comenzó a desplegar la infraestructura para 5G exclusivamente, pero el Micitt advierte la creciente demanda. “Vemos mucho interés de los casos de uso en el sector de agricultura y hay tanta sed porque Costa Rica tiene un rezago muy importante a nivel productivo: cuando comparamos la productividad por hectárea de ciertos productos, es evidente que se puede mejorar mucho con tecnología, con redes privadas”, dijo. Subrayó, además, la demanda existente en las zonas francas, a los que destacó como “los que han estado más intensos pidiendo los casos de uso”.
Inclusive, el viceministro apuntó que tres operadores, de los que accedieron al espectro (incluidos los dos nacionales) están planificando suplir esos casos de uso, a la vez que hay un operador, Ring Centrales, que dijo que se concentrará en estas iniciativas industriales.
La apuesta por las redes privadas está en la agenda oficial. “Hemos pensado en incentivar que la próxima subasta de espectro sea lo más pronto posible, en medio tenemos la subasta de radio y televisión, de la cual es vital porque liberará 92 MHz de banda 600, que va a ser lo más atractivo para la próxima licitación de frecuencias IMT”, reconoció el funcionario y elucubró que podrían incluirse algunos bloques de 3500 MHz, un bloque de 70 MHz en 2600 MHz, y 92 MHz de banda 600 MHz.
Esa disponibilidad apunta a resolver “casos de uso de conectividad rural y en islas, donde instalar cables submarinos es algo excesivamente caro para un país como Costa Rica y donde, al igual que en países como Noruega, las soluciones FWA con bandas bajas resulta muy llamativo. Esto termina de configurar mucho mejor a un país que ya es altamente conectado, pero donde nos falta esa última milla, que es lo que más caro cerrar. Son tiempos emocionantes porque creo que los próximos dos a tres años, quien ocupe mi silla en ese momento, va a tener mucho que hacer”.
Dos temas de coyuntura: ciberseguridad y los datos que pidió Hacienda
A la coyuntura 5G, se suman dos temas de contexto y de interés para el sector: el reglamento de ciberseguridad y el debate profundo surgido luego que el Ministerio de Hacienda pidiera los datos de los operadores de telecomunicaciones.
“El reglamento de ciberseguridad no está congelado, ya se han ido completando las fases y está en funcionamiento. Hace una semana se liberó la última resolución, donde los artículos que estaban congelados ya están ya están liberados. Igualmente, no se ha completado aún la totalidad del proceso y se está en una etapa en la que no está detenido en decreto, pero existen siete procesos donde en cualquiera de esos se podría tener un retroceso, aunque todos han llevado una progresión positiva”.
El funcionario reconoció que el proceso judicial es lento y que a esa dificultad se suma la mirada internacional, dado que la experiencia es observada desde otras naciones con el objetivo de replicar el reglamento. “En Costa Rica están puestos muchos ojos de la región para ver si replican algo: hemos tenido noticias de un país caribeño, de un país del cono sur y de un país centroamericano que están considerando tomar decisiones muy similares”.
En cuanto al debate inaugurado por Hacienda, el funcionario aseguró que está judicializado y que también espera la sentencia final de la Justicia.
Debe estar conectado para enviar un comentario.