TeleSemana.com lo adelantó hace un mes: el gobierno de Colombia diseñó una Estrategia Nacional de Ciberseguridad, una hoja de ruta con 29 acciones transversales que traza el horizonte hasta 2027 y que acaba de presentarse este martes 24 de junio, en un acto oficial. La medida surge luego de varios intentos de tener una normativa acorde, proyecto que volverá a radicarse en el Parlamento durante el segundo semestre.
En el marco del anuncio oficial se precisó que el foco está puesto en atender las urgencias y las necesidades que impone el creciente ecosistema digital, que permitan dinamizar y proteger la economía. Resiliencia, talento humano, innovación, articulación inter e intra institucionales, son algunos de los componentes de largo plazo.
Se trata de una iniciativa desarrollada en el marco del Comité Nacional de Seguridad Digital y que contó con el apoyo de la Sección de Ciberseguridad del Comité Interamericano contra el Terrorismo de la Organización de los Estados Americanos (OEA/CICTE); en un marco donde se registra un constante incremento de las amenazas. En 2024, el país enfrentó cerca de 36.000 millones de intentos de afectación, algo que los ubicó como el segundo país más atacado de Latinoamérica, con el 17 por ciento de las amenazas que impactaron a sectores como el financiero, la salud y el energético.
36.000 millones de ataques
Julián Molina, titular del Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (MinTIC), precisó que “36.000 millones de intentos de afectación, es una cifra bastante elocuente de lo que nos ha venido pasando en el sistema de información, y es una cifra elocuente que quiere decir que los bandidos cibernéticos están trabajando mucho, que no descansan y que implican un riesgo y un reto para nosotros; que tenemos que trabajar igual, ser un escudo efectivo y eficiente para que estos ataques no lleguen a su fin. Efectivamente, hemos bloqueado 32.000 ataques. Tenemos un 73 por ciento del total de reportes en incursiones en el sistema institucional de Colombia y el sistema financiero ha invertido 1,7 billones de pesos en protección en ciberataques. Esto nos da una gran magnitud del problema que nosotros estamos enfrentando”.
El ministro también se refirió a la “debilidad institucional” que enfrentan en el país y contó como la Consejería Presidencial abogaron por lograr una legislación que permita fortalecer la institucionalidad relacionada con los ataques informáticos y la ciberseguridad, pero que no se ha logrado.
“Creo que a partir de este semestre podremos nosotros hacer un nuevo dispositivo normativo que efectivamente se convierta en ley y tener una Agencia Nacional de Seguridad Digital presta, que esté concentrada, porque la concentración es importante es una fortaleza (la dispersión es una debilidad); y creo que esa Agencia de Seguridad Digital podrá tener las mismas condiciones que hoy tenemos, pero con mayor concentración”, dijo el funcionario quien subrayó, además, que hacen falta 5.000 talentos especializados, a la vez que detalló las iniciativas formativas que se desarrollan para paliar esta necesidad y crear “guardianes de la ciberseguridad”.
El punitivismo del caso también estuvo en el foco de los retos en los que profundizó el funcionario para, por ejemplo, actualizar el Código Penal.
Saúl Kattán, Alto Consultor para la Transformación Digital de la Presidencia de la República de Colombia y un impulsor histórico de esta iniciativa, también participó del lanzamiento quien se refirió a la necesidad de promover talentos digitales y de tener una estrategia de defensa, de resiliencia y de gobernanza
“Yo hablo de que el país, no como gobierno, necesita por lo menos 100.000 expertos en seguridad digital que permitan apoyar, no sólo a las entidades de gobierno nacional, sino a las de gobierno regional y del sector privado. Cada vez tenemos más problemas, cada vez los malos son más hábiles, y las tecnologías, la inteligencia artificial se usa para potencializar a los malos, por supuesto para potencializar la defensa también; pero si no tenemos defensa, la potencialización de los malos, es cada vez mayor”, dijo Kattán. Añadió, en este sentido, que “tarde o temprano van a atacarnos, tarde o temprano van a ser exitosos. Eso está probado y tenemos que ser capaces de ser resilientes, de poder realmente recuperarnos con el menor impacto posible; ahí es donde ganamos”.
Kattán invitó a todo el ecosistema digital a ser parte activa de esa estrategia y a “hacer realidad” esta hoja de ruta que se propone, porque “si no logramos generar este círculo completo con el sector público, el sector privado, esto va a ser muy difícil; porque el sector privado en muchos de los casos tiene las protecciones, pero si al final se meten por alguna entidad del sector público, allá van a llegar y nos van a hacer daño. Necesitamos el compromiso de todos”.
Una estrategia con foco en las personas
Para Viviana Banegas, directora de Desarrollo Digital del Departamento Nacional de Planeación, celebró el anuncio y definió a esta estrategia como “una herramienta que va en concordancia y en armonía con otras políticas públicas y con una misma visión que contribuye al desarrollo, uso y apropiación de las nuevas tecnologías digitales”; y destacó que aunque no se logró instrumentar toda la institucionalidad ideada, a través de una ley, “dejamos hitos importantes para poder avanzar”.
En su mirada, la seguridad digital es la “garantía de las libertades, la protección de la dignidad y el desarrollo integral de las personas, el fortalecimiento de las entidades del Estado y la legislación para un ecosistema digital seguro y confiable, es decir, el equivalente a lo que hoy en día es la seguridad física. Asimismo, tenemos que ver con relevancia los temas de seguridad en el entorno virtual”.
“Actualmente en Colombia ya contamos con un modelo de gobernanza para la seguridad digital; podemos decir que tenemos roles puntuales, actividades específicas, que también conocemos quién está en cabeza de estos temas. Sin embargo, lo más importante es que nos falta avanzar, no solamente en fortalecer la institucionalidad en esta materia, sino también llevar a cabo las acciones que tenemos acá”, dijo Banegas.
Destacó, asimismo, que “si bien la seguridad digital se enfoca, entre otros, en la protección de infraestructuras críticas, cibernéticas y servicios esenciales, también aplaudo el rol principal que le da esta estrategia al ser humano, en la priorización de los derechos fundamentales, incluyendo la privacidad, la libertad de expresión y la protección de datos personales y la seguridad de los ciudadanos en el entorno digital”.
La viceministra de Transformación Digital, Carina Murcia, destacó también el enfoque de género y subrayó que creció a nivel mundial la presencia de mujeres en materia de ciberseguridad: al 10 por ciento en 2013, al 25 por ciento en 2024 y al 30 por ciento estimado para el cierre de 2025.
“En Colombia la brecha persiste: sólo el tres por ciento de los profesionales de ciencias de la tecnología y la computación son mujeres” precisó Murcia y enfatizó en la promoción de la educación en esta materia a las niñas.
En coincidencia con el anuncio, TeleSemana.com realizó una Charla de Café para analizar la cuestión de la ciberseguridad a nivel regional y su inserción en las agendas digitales de los países, de la que participó Ingrid Hernández Sierra, asesora Presidencial y Coordinadora de la Consejería de Transformación Digital de la Presidencia de la República de Colombia, y actora fundamental de este plan, que está disponible aquí.
Pero en el acto realizado en Colombia, Hernández Sierra, detalló el paso a paso del plan, que el foco está puesto en el fomento de la cooperación internacional y puntualizó en la cuestión cultural que involucra entender el rol que ocupa la academia, el sector privado y el público, pero también la sociedad civil en concretar avances: “Colombia tiene que tener, si o si, una Ley de Ciberseguridad”.
“La ciberseguridad debe ser acompañada por transparencia”, dijo Hernández Sierra, repasó cómo se consiguieron consensos y cómo se puso el foco en el robustecimiento de los resortes que garantizan la buena salud de la democracia. También planteó la necesidad de que el marco legal que se debe desarrollar tenga la flexibilidad para ponderar el desarrollo tecnológico, y adelantó que en el segundo semestre se volverá a radicar el proyecto regulatorio en el Parlamento.
Toda una apuesta, sobre todo para que el espíritu “no se quede en papel”.
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