La incorporación de la inteligencia artificial (IA) a las redes 4G y 5G está generando una transformación significativa en la manera en que operan y proporcionan servicios. La IA se emplea para optimizar la eficiencia, el rendimiento, la seguridad y la experiencia del usuario en las redes móviles. Entre los beneficios clave se encuentran la mejora de la eficiencia mediante la optimización del espectro y la gestión del tráfico, lo que reduce costos y mejora el rendimiento. Asimismo, la IA contribuye a mejorar el rendimiento de las redes móviles, la seguridad al detectar amenazas como malware, y la experiencia del usuario mediante la personalización de servicios y recomendaciones. Ejemplos concretos incluyen la optimización del espectro, la asignación eficiente de recursos, la gestión del tráfico, la garantía de calidad de servicio (QoS) y la ciberseguridad.
En conjunto, la llegada de la IA a las redes móviles representa una tendencia transformadora en la industria de las telecomunicaciones, brindando a las empresas ventajas significativas para elevar la eficiencia, el rendimiento, la seguridad y la experiencia del usuario.