Como una buena noticia tomamos el anuncio de lo que puede llegar a ser la primera red TD-LTE Wholesale en México y Latinoamérica. No en vano, la idea de las empresas involucradas es crear un nuevo negocio relacionado con la banda ancha. Por lógica, nuevo negocio de banda ancha debe suponer mayor riqueza para ese mercado. Sin embargo, una vez digerida la euforia de ver que el modelo de negocio Wholesale LTE se desarrolla a la par en Rusia, Estados Unidos y México, nos entran las dudas sobre el proyecto.
La primera pregunta es saber a quien le va a vender capacidad LTE este operador MVS Comunicaciones con sus nuevos socios. El mercado de telefonía móvil tiene una constitución bastante problemática si, por ejemplo, a América Móvil no le interesa comprar capacidad. ¿Cuántos usuarios tienen Iusacell, Movistar y Nextel que realmente necesiten en la actualidad LTE?
Por otro lado, el operador podría atacar a ISPs o cable operadores para que repliquen el modelo que les ofrecer ClearWire a los operadores de cable de Estados Unidos para que puedan asociar a su servicios de televisión y banda ancha fijo un componente móvil. Si este es el mercado potencial, ¿permitirá la regulación que operadores sin concesión para telefonía móvil puedan ofrecer banda ancha móvil empaquetada con la fija? Este asunto regulatorio se suma a que los ISPs fijos y las cable operadoras de México no tienen el poder de mercado ni aglutinan a tantos usuarios como las de Estados Unidos.
