Esta semana se acaba de anunciar que José F. Otero, veterano analista del sector con dos décadas a sus espaldas ofreciendo su visión analítica y consultiva a múltiples empresas del sector —y medios de comunicación—, dirigirá las operaciones de 4GAmericas en el Caribe y Latinoamérica.
Diez años después de fundar y presidir Signals Telecom Consulting, Otero emerge como una figura que podría ser clave para el desarrollo de 4GAmericas en Latinoamérica y el Caribe, donde dicho organismos había quedado algo ensombrecido o, visto desde la óptica de nuestra redacción, sin un rumbo claro.
Mientras Otero se acomoda en su nueva butaca, hemos tenido la oportunidad de entrevistarlo en exclusiva para que nos ofrezca su primera visión de algunos de los acontecimientos más relevantes del sector de las telecomunicaciones en Latinoamérica. Estas son sus respuestas pocas horas después de “jurar” su nuevo cargo.
¿Cuales son los objetivos de la organización para los próximos 18 a 24 meses?
Nuestros objetivos para los próximos 18-24 meses es promover el desarrollo de las tecnologías inalámbricas de banda ancha que forman parte del 3GPP. Para lograrlo queremos ser un aliado de todos los actores importantes de la región en el fomento de un dialogo constructivo enfocado en el impacto positivo de los servicios de banda ancha móvil en el desarrollo económico y social de América Latina y el Caribe.
En América Latina ya se ofrece LTE en varios países de la región y este año se empezó a licitar la banda de 700 MHz, pero todavía el 4G no tiene una adopción muy alta, ¿por qué?
La aparente lenta adopción de LTE es un fenómeno normal que se repite cada vez que se comienza a desplegar una nueva tecnología móvil. Eso se da por diversos factores entre los que se encuentra la disponibilidad de espectro radioeléctrico para desplegar la tecnología, la expansión de las redes, disponibilidad de teléfonos, entre otros.
¿Cree que una vez liberada la banda de 700 MHz vamos a ver una explosión de LTE?
La asignación de la banda 700 MHz para el despliegue de LTE es una gran noticia para la región como lo es la asignación de otras bandas para este fin. No obstante, la asignación de espectro radioeléctrico es solo un componente para la comercialización de LTE. Hay que tener en cuenta que el espectro debe estar limpio, que la asignación de permisos para el despliegue de infraestructura sea transparente y que la infraestructura presente soporte el despliegue de redes inalámbricas capaces de transmitir datos a altas velocidades.
Los operadores señalan que LTE implica tasas de inversión muy altas y la comercialización de la red 4G no parece variar de lo que se venía haciendo con 3G —de hecho en varios países se utiliza LTE como un upgrade de 3G—, ¿Está claro el modelo de negocio que permita un retorno de la inversión?
Cada operador seleccionará el modelo de negocios que considere más acertado para el mercado en que está presente. Pero recordemos que en un segmento tan dinámico como el móvil, los operadores van modificando su modelo de negocios según vaya evolucionando el mercado. No debemos olvidar que en las pasadas dos décadas los operadores móviles de la región han hecho importantes inversions para ofrecer servicios por medio de nuevas tecnologías a sus clientes.
¿Qué papel cree que tendrán los servicios de streaming de video y audio en la monetización de LTE?
Todos estos servicios representan una oportunidad tanto para los operadores que pueden utilizarlos para hacerse más atractivos. Los consumidores también se beneficiarían pues comenzarían a tener acceso a nuevos servicios. Pero nuevamente cada operador es quién definirá el rol que tendrán los servicios audiovisuales en su propuesta de valor.
Uno de los problemas que enfrentan los operadores para el desarrollo de 4G es la necesidad de conectar las antenas con fibra óptica, y el costo que esto implica, ¿cree que esto podría impactar en el desarrollo de LTE? ¿Qué otras tecnologías se pueden utilizar para backhaul LTE?
Como bien has señalado la disponibilidad de backhaul es un requisito esencial para el sano desarrollo de las redes LTE. Afortunadamente muchos gobiernos comprenden esta necesidad y dentro de sus planes de conectividad se incluye el despliegue de fibra óptica en localidades en las que anteriormente no había infraestructura fija. Aunque no nos olvidemos que existen tecnologías inalámbricas fijas y servicios satelitales que se utilizan en la región para dar backhaul a las redes móviles.
En América Latina tanto fabricantes como operadores creen que todavía hay espacio para crecer en 3G, ¿cuál es su opinión?
Las cifras de crecimiento de los servicios de banda ancha móvil en la región muestran que las redes HSPA+ (que utilizan las redes UMTS en la region) estan teniendo un rápido crecimiento llegando a 245 millones de lineas al tercer trimester de 2014, según Ovum. Como puedes ver las redes 3G como habilitadoras de HSPA+ tienen un gran futuro en la región.
También es importante considerar que las proyecciones de distintos firmas de analistas estiman que América Latina experimentará un 900 por ciento de crecimiento en data móvil de aquí al 2019. Obviamente, para que esto se cumple debe haber una importante expansión en la cobertura de redes HSPA+ y LTE en la región.
¿Cuándo cree que se verá el apagón de las tecnologías 2G?
Aunque ya estamos observando el freno e incluso una reducción de lineas GSM en América Latina, el apagón de estas redes variará mercado a mercado. La decisión final dependerá de las regulaciones de cada entorno competitivo, la demanda por tecnologías más avanzadas y los planes de migración tecnológica de cada operador.
En Chile y Brasil se discuten iniciativas para que los operadores puedan hacer transferencia de espectro, previa autorización del regulador. ¿Qué opina sobre este asunto? ¿Cree que va a ser útil para evitar que haya un recurso ocioso?
Desde 4GAmericas estamos monitoreando de cerca estas discusiones. Lo que tenemos claro es que en la región hay necesidad de la asignación de mayor cantidad de ancho de banda inalámbrica para la oferta de servicios móviles. Pero no solo que sea asignada, sino que la misma sea utilizada para ofrecer servicios por quienes poseen estas concesiones.
Si la decisión final va dirigida a otorgar más espectro a los operadores de redes para el despliegue de nuevas tecnologías sería algo positivo, pero estamos aún en etapa de estudio pues los detalles de este tipo de transferencias son muy importantes. Tampoco sería beneficioso que el mercado secundario de espectro sea origen de especuladores de espectro radioeléctrico como se observó en la década pasada en varios mercados del Caribe.
