El mercado móvil chileno cerró 2016 con 28,8 millones de suscriptores, de los cuales el 18 por ciento, cinco millones, correspondía a LTE. Para 2021 se espera que haya 29,2 millones de suscriptores y el 49 por ciento, 14,2 millones, serán 4G. La información fue provista de 5G Americas, que espera que la cantidad de líneas LTE crezca 184 por ciento en cinco años.
La cobertura de redes LTE inició entre 2013 y 2014 con la adjudicación de espectro en la banda de 2,6 GHz. Luego, en 2015, se registraron despliegues en AWS y, más tarde, en 700 MHz —Entel ya completó el 100 por ciento de cobertura sobre el territorio chileno sobre esta banda—. La combinación de 2,6 GHz y 700 MHz permitió la agregación de portadoras y despliegue de LTE-A, convirtiendo a Chile en uno de los primeros países de la región en comercializar estos servicios en Latinoamérica y el Caribe. Actualmente lo ofrecen Entel, Claro y Movistar.
El organismo espera que en los próximos años el mercado chileno tenga un acelerado crecimiento de LTE en sus versiones Release 12 y 13 (LTE-A y LTE Pro). “Esto implicará una mejora en la transmisión de datos, con picos de velocidad superiores a los 250 Mbps y una red diseñada para soportar de manera más eficiente el tráfico que será generado por el crecimiento de Internet de las Cosas, allanando de esta forma la llegada de 5G en la próxima década”, dijo 5G Americas en un comunicado.
Además, el organismo agregó que la madurez del entorno LTE en ese país también permitirá aprovechar mejor a la comunicación sobre banda ancha, gracias a desarrollos como VoLTE y ViLTE. “Para que el entorno de Chile alcance su potencial es necesario mantener políticas de identificación de espectro para banda ancha móvil y ejecutar procesos como la transición a TDT que permita aprovechar el dividendo digital en más partes del país”, concluyó.
