Las cifras que presenta Cuba en materia de conectividad serían buenas si no se tuviera en cuenta que celebra crecimientos y lanza servicios que otros países de la región presentaron al menos una década atrás. La reciente llegada de 3G en la isla puso a un lado las cifras de un Internet fijo que cumplió dos años de vigencia para hogares que pudieran pagarlo.
Hasta que terminó 2016 Internet fijo era un lujo que solo podían darse funcionarios vinculados con el gobierno y algunos profesionales en Cuba. Eso cambió cuando la estatal presentó propuestas para el mercado residencial, acotado a un acceso máximo de 30 horas al mes, restricción que todavía se mantiene. Primero se presentó un piloto en La Habana y cuatro meses después ya se habían registrado 600 usuarios.
El último registro habla de que 70.418 usuarios utilizan el servicio de Internet fijo en sus hogares, indicó el Periódico Cubano. La palabra usuarios es igual a cuentas, pues para acceder cada interesado debe pagar para recibir un alias y contraseña que le permita navegar. Con un cálculo simple, se puede indicar que hay una cuenta por cada 56 hogares o que uno de cada 156 habitantes de la isla es usuario del servicio.
Además del retraso, Cuba tiene al menos dos problemas más: precio y calidad. El 95 por ciento de los usuarios utiliza la conexión de 1 Mbps de subida y 256 Kbps de bajada, unas métricas que ni siquiera podría compararse con las que presentan otros países. Para contratarla por 30 horas mensuales, un usuario debe pagar 15 CUC (moneda equivalente al dólar), prácticamente la mitad de un salario medio en la isla. Hay otras tres propuestas, de 2 MB, 3MB y 4 MB de subida por hasta 70 dólares.
El servicio está actualmente disponible en 115 municipios, casi el 70 por ciento de los 168 en los que se divide el país. A los accesos a Internet se suman 1,9 millones de cuentas permanentes de navegación Nauta, de acuerdo a la información presentada por autoridades nacionales en el marco del II Taller Nacional de Informatización y Ciberseguridad Territorial.
Sobre la incorporación de Internet en móviles, los datos al siete de enero dan cuenta de que utilizaron el servicio 1,8 millones de teléfonos en el país. Hubo dos millones de transacciones de paquetes de datos por las que se facturaron unos 12,5 millones de dólares. Ahora, la empresa trabaja en masificar 3G, lanzar 4G y seguir sumando sitios Wi-Fi para poner a Cuba un poco menos lejos del resto del mundo en materia de conectividad.