A principios del segundo trimestre se tomó conciencia de la crisis económica que sacudirá al mundo por el impacto del covid-19. Abril ha sido un mes de freno económico a nivel mundial pero, a medida que las cuarentenas se fueron flexibilizando, la actividad económica empezó a recuperarse. Además, el mundo online sirvió para compensar las ventas de sectores muy golpeados como el comercio.
Algunas decisiones tomadas por los Estados Unidos en materia monetaria, además, estabilizaron los mercados financieros y los tipos de cambio en América Latina. No obstante, Oxford economics estima que el producto bruto interno (PBI) de las seis economías más importantes de América Latina se ha contraído en un 18 por ciento durante la primera mitad del año.
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Para los operadores de telecomunicaciones, el trimestre cerró con una contracción en los ingresos aunque, en general, la caída parece ser mucho menor a la de la economía. AT&T reconoció 320 millones de dólares en costos destinados a acciones corporativas para proteger a sus empleados y colaboradores y atender la disrupción en los costos de producción de WarnerMedia. Adicionalmente, la compañía estimó un impacto negativo de 510 millones en sus operaciones durante el segundo trimestre.
El Grupo Telefónica, en tanto, registró un impacto negativo estimado de 729 millones de euros relacionados con la pandemia del covid-19, que justifica por menores ingresos por servicio y ventas de terminales durante el covid-19. Particularmente, la compañía resalta la caída en la facturación por servicios de roaming, la actividad comercial en el segmento residencial y retrasos de proyectos en pequeñas y medianas empresas.
Si miramos hacia el resto del año, nuestros negocios móviles y B2B todavía tendrán algunos desafíos, pero creemos que ya hemos pasado el punto más bajo. Balan Noir, CEO de Liberty Latin America.
En general, lo que se observa en los reportes de resultados es que los servicios más golpeados por la crisis fueron los empresariales, ya que el cierre de las oficinas derivó en una menor demanda de servicios corporativos. El operador mexicano Megacable alertó en su reporte de resultados que se registró un “un deterioro en los ingresos de los segmentos corporativo y empresarial, consecuencia de la suspensión de operaciones en la mayoría de las empresas”. En junio, a medida que se flexibilizó el aislamiento obligatorio, “se observaron indicios de recuperación en el mercado empresarial, resultado de la apertura de algunas industrias”, aunque alertó que la mejoría “no fue suficiente para compensar el comportamiento de los dos meses anteriores”. Millicom, en tanto, señaló que el golpe en corporativo se focalizó en las pequeñas y medianas empresas que no han podido con la crisis económica y de salud.
“Los ingresos de redes fijas asociadas al segmento de clientes empresariales, en especial para la provisión de soluciones integradas de voz,datos e Internet, así como servicios de tecnología de la información (TI) y servicios digitales decrecieron en el período básicamente por menores ventas asociadas a la puesta en marcha y de equipamiento de proyectos. Por su parte, los servicios de “Entel Hogar” asociados a Internet, telefonía y televisión, en su conjunto presentan un constante crecimiento de ingresos”, señala Entel, que opera en los mercados de Chile y Perú.
También se vieron impactados negativamente los operadores con fuerte negocio en el área de contenidos debido a la fuerte caída en la demanda de publicidad, además de la cancelación de eventos deportivos televisados. “Si bien, la versatilidad y solidez en la oferta de contenido en las pantallas de TV Azteca lograron amplia presencia en los hogares mexicanos durante la emergencia sanitaria, la demanda de espacios publicitarios se redujo de manera considerable”, comentó Benjamín Salinas Sada, Director General de TV Azteca. AT&T, en tanto, hizo hincapié también en el cierre de los cines, que puso mayor presión a los ingresos de su división de contenidos.
La cuarentena tuvo un mayor impacto en el negocio móvil, especialmente en aquellos mercados con restricción fuerte en la modalidad, pero ahora estamos viendo alivio y la mayoría de nuestros indicadores de performance y nuestros ingresos mejoraron en junio en la comparación con abril y mayo. Mauricio Ramos, CEO de Millicom.
Los servicios móviles tampoco quedaron exentos de un impacto negativo por la pandemia. El tráfico móvil, por ejemplo, se contrajo por la migración hacia redes fijas y Wi-Fi. Los usuarios postpago optaron por planes más económicos y, en el caso de prepago, o bien se realizaron menos recargas o bien se dejaron de pagar los servicios. América Móvil, por ejemplo, registró una baja de cinco millones de líneas durante la pandemia.
La cobranza de los operadores se vio afectada en mercados en los que los usuarios no estaban acostumbrados a realizar pagos online. La venta de equipos en algunos mercados también disminuyó como consecuencia del cierre de tiendas.
En el mundo fijo, en donde se concentró la demanda de conectividad por el aislamiento obligatorio, el impacto del covid-19 fue limitado. América Móvil indicó una disminución del -0,7 por ciento en el primer trimestre que se agravó en el segundo trimestre hasta 1,7 por ciento debido a una baja en los ingresos por servicios de televisión paga. De los servicios al hogar, la banda ancha fija fue la que permitió compensar la caída con ingresos por encima del 7,3 por ciento, similar a lo registrado en los trimestres anteriores. En el caso de Millicom la compañía señaló que el mercado residencial se mostró más resiliente que el móvil, “pero los ingresos se han igualmente erosionado durante el segundo trimestre debido en parte a la decisión comercial de soportar temporalmente a nuestros clientes más necesitados con conectividad básica sin costo”. La compañía ofreció servicio gratuito a 900.000 clientes de hogares durante el peor momento de la pandemia, de los cuales logró reconectar con servicios tradicionales a 650.000.
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Si bien todos parecen coincidir en que el peor momento ya pasó —y hasta se mantienen las perspectivas de crecimiento para el cierre del año—, los operadores se muestran cautos hacia el futuro. “El deterioro de las condiciones económicas mundiales como resultado de la pandemia podría, en última instancia, reducir la demanda de los productos de la compañía a través de sus segmentos a medida que sus clientes y usuarios reduzcan o pospongan su gasto”, alerta Televisa. La incertidumbre es moneda corriente en el mundo y esto se puede ver en los riesgos asociados que Entel visualiza para su mercado, pero que pueden trasladarse a cualquier operador de la región: riesgos relacionados con el tipo de cambio, al mercado de tasas de interés, riesgo de crédito —tanto en el acceso a crédito como a todo lo relacionado a cuentas por cobrar— y liquidez, entre otros.
Trilogy International, que opera en Nueva Zelanda y Bolivia, señala un deterioro mayor en el país latinoamericano que en Oceanía. “Existe la incertidumbre de si el comportamiento del usuario en Bolivia retomará a las normas habituales, lo que puede impactar en la cantidad y el tiempo de recaudación de efectivo, los gastos de endeudamiento y las tendencias en ingresos”, señaló Trilogy en un reporte de resultados.
En base a la evolución del negocio en lo que llevamos de año, confirmamos el dividendo de 2020 y reiteramos el crecimiento OIBDA-CapEx de 2020 y los objetivos de 2022 de crecimiento de ingresos y expansión del margen de flujo de caja operativo. José María Álvarez Pallete, CEO de Telefónica.
En este contexto, la fórmula de los operadores es reducir en lo posible sus costos e inversiones, para prepararse ante un escenario negativo durante el tercer y cuarto trimestre del año. En una presentación a sus accionistas, Daniel Hajj, CEO de América Móvil indicó que se está analizando una reducción de la previsión de Capex para este año. “Todavía no sabemos exactamente cuanto, pero vamos a reducir el Capex”, indicó el ejecutivo.
TIM en Brasil, en tanto, ya muestra una reducción del 28,8 por ciento en el Capex a raíz del covid-19, comparado con el mismo trimestre de 2019. “La baja se explica, principalmente, por la re-evaluación de proyectos que estaban inicialmente planeados. Durante el aislamiento social observamos una migración en el perfil de uso de bandas de nuestra red móvil, con una distribución más uniforme del tráfico a lo largo del día y menos concentrado geográficamente. De esta forma, el Capex de la red móvil está siendo reorientado y las inversiones de fibra óptica están manteniéndose por el aumento de la demanda de ancho de banda”, indica la compañía en un comunicado.
En el caso de Liberty Global, el foco para los próximos meses está puesto en la generación de caja. Lo mismo ocurre con Telefónica que, en línea con su enfoque en reducción de deuda, señala que en el segundo trimestre ha logrado mejorar la eficiencia y generar ahorros tanto en Opex como en Capex y entregar buenos resultados en el nivel de flujo de caja operativo. “El Opex fue controlado, con una caída del 4,9 por ciento en el segundo trimestre en términos orgánicos mientras que la flexibilidad del Capex y una ralentización de su ejecución resultó en una reducción del 22,3 por ciento orgánico”, señaló la compañía en la presentación de resultados.
Todo parece indicar que el peor momento para los operadores ha pasado. Con la economía reactivándose, las perspectivas a nivel financiero se mantienen para este año. El segundo trimestre fue desafiante pero para los meses que se vienen no se espera tampoco demasiada tranquilidad. Las consecuencias del freno de la economía por la pandemia todavía están por verse. Los operadores reaccionan recortando gastos y analizando con lupa sus inversiones.
