Las tarjetas SIM han ido evolucionando a gran velocidad en los últimos años, especialmente porque se han ido reduciendo en tamaño para aprovechar mejor el propio espacio dedicado a esta importante pieza dentro de los dispositivos. Ahora la reducción empieza a ser total pues la tarjeta va a desaparecer. Con la eSIM la tarjeta dejaba de existir fisicamente para ser virtual, pero aún así esta virtualidad obligaba a poner componentes en los dispositivos, esto ahora está ya cambiando con la llegada de la iSIM, donde la SIM se virtualiza y además no ocupa espacio adicional en los dispositivos.
Esta semana Vodafone, Qualcomm Technologies y Thales anuncian haber unido fuerzas para demostrar un teléfono inteligente que funciona con iSIM, basado en la especificación ieUICC de la GSMA. Esta tecnología permite integrar la funcionalidad de una tarjeta SIM en el procesador principal del dispositivo y no en uno dedicado a esta función. Este paso es importante porque permitirá la comercialización de la tecnología, que podría implementarse en una serie de nuevos dispositivos que utilizarán iSIM para conectarse a servicios móviles, dice el comunicado conjunto divulgado por las tres compañías.
La iSIM, que cumple con las especificaciones de la GSMA, integra la funcionalidad SIM en el procesador principal del dispositivo, lo que permite una mayor integración del sistema, un mayor rendimiento y una mayor capacidad de memoria. Esta tecnología es la última evolución de la tecnología SIM en la que las ‘eSIM’ están integradas en los dispositivos. Sin embargo, eSIM requiere un chip separado, mientras que con la iSIM ya no es necesario, eliminando la necesidad de un espacio dedicado asignado a los servicios SIM.
La tecnología iSIM es una evolución significativa de las soluciones eSIM existentes y brinda beneficios mayoristas tanto a los consumidores como a los operadores de telecomunicaciones, allanando aún más el camino para que los servicios móviles se integren en dispositivos más allá del teléfono móvil, como computadoras portátiles, tabletas, plataformas de realidad virtual, dispositivos IoT y wearables, entre otros.
La iSIM aporta muchos beneficios. Por un lado, simplifica y mejora el diseño y el rendimiento del dispositivo al liberar espacio que el fabricante puede utilizar para incorporar otras tecnologías. Además, consolida la funcionalidad SIM en el conjunto de chips principales del dispositivo junto con otras capacidades críticas como GPU, CPU y módem. Y, finalmente, permite el aprovisionamiento remoto de SIM por parte del operador aprovechando la infraestructura eSIM existente.
Se llevó a cabo una demostración de prueba de concepto (PoC) en Europa, como una de las regiones con mayor penetración global de teléfonos inteligentes. La PoC ilustra la preparación comercial y la eficiencia de la tecnología trabajando en la infraestructura existente, aprovechando las capacidades de red avanzadas de Vodafone. En la demostración, el dispositivo de prueba de concepto completamente operativo utilizado en la red de Vodafone se basó en el Samsung Galaxy Z Flip3 5G con tecnología de una plataforma móvil Snapdragon 888 5G, que cuenta con una unidad de procesamiento de Qualcomm integrada que ejecuta el sistema operativo Thales iSIM. Esta prueba de concepto tuvo lugar en los laboratorios de Samsung utilizando la plataforma de gestión remota avanzada de Vodafone.
“Nuestro objetivo es crear un mundo en el que todos los dispositivos se conecten entre sí sin problemas y de forma sencilla, y el cliente tenga el control total. La iSIM, combinada con nuestra plataforma de gestión remota, es un gran paso en esta dirección, ya que permite conectar dispositivos sin una SIM física o un chip dedicado, haciendo realidad la conectividad IoT”, dice Alex Froment-Curtil, director comercial de Vodafone.
