La transformación digital parece volver difuso, por momentos, los límites que separan la barrera de lo real con la de lo virtual. Por momentos y según se lo enfoque, parece ciencia ficción, pero la realidad supera toda posible inventiva. “Cuando los átomos se cruzan con los bits: Los cimientos de nuestra nueva realidad” es el reciente documento publicado por Accenture, en el que profundiza los detalles de una nueva realidad mixta o híbrida, cuyo cambio no se propone paulatino sino radical. Las cuestiones culturales, los procesos, los problemas de interoperabilidad y de identidad digital, el metaverso, la inteligencia artificial (IA) y la IA Generativa, la ciberseguridad, entre otras.
“Nos hallamos ante una apasionante frontera de la innovación tecnológica para empresas: un punto en el que no sólo digitalizamos, sino que estamos empezando a aprovechar esa base digital”, dice el informe del Technology Vision elaborado por Accenture, en el que se hace un repaso sobre las apuestas que realizaron las industrias (de Salud, de manufactura, de ciencia, entre otras) para “identificar las tendencias tecnológicas emergentes que tendrán mayor impacto en las empresas, agencias gubernamentales y otras organizaciones en los próximos años. Este año, las tendencias miran una década hacia el futuro, sin dejar de ser relevantes en todos los sectores y aplicabilidades a las empresas de hoy”.
“Un equipo de investigadores de química computacional en la Universidad de Nuevo México usa potentes equipos informáticos para realizar en apenas cuatro años estudios para los que necesitarían 7257 años si emplearan un solo ordenador portátil. SSolugen, una startup de biotecnología, ha utilizado ciencia y tecnología para desarrollar un nuevo método de fabricación de productos químicos industriales con azúcar en lugar de combustibles fósiles, y ya está colaborando con empresas de tratamiento de agua. Y Nokia ha unido fuerzas con AST SpaceMobile para construir la primera red de satélites en órbita cercana a la Tierra capaz de llevar el 5G a zonas remotas, lo que los convertiría en los primeros proveedores de banda ancha para comunidades rurales o sin servicios”, dice y pincela ejemplos concretos de la tendencia disruptiva.
Las tendencias, según el enfoque de este trabajo, versan en torno a la identidad digital, la transparencia de los datos, y la inteligencia artificial generativa. En relación al primero precisa que “se está convirtiendo en la clave de las aspiraciones tecnológicas de las empresas y los esfuerzos que se están llevando a cabo para re-imaginarla, no sólo para las personas, sino para todas las cosas”. Respecto de la transparencia de los datos, considera que será el recurso más preciado porque “los ecosistemas de datos están siendo remodelados por una transparencia radical, ya que las empresas aprovechan este tesoro para ofrecer una visión sin precedentes de su negocio”. Y sobre las posibilidades que ofrece la IA Generativ advierte la presencia de un nuevo Big Bang, el de la informática y de la ciencia. “Tras décadas de excesiva atención a la tecnología digital, la ciencia está volviendo a ocupar un lugar destacado en las agendas de las empresas”.
Este trabajo es producto de una encuesta realizada a 4.777 ejecutivos y directores de 25 industrias, quienes aportaron sus perspectivas y uso de las tecnologías emergentes en sus organizaciones; consultas que se realizaron entre diciembre de 2022 en enero de 2023 en 34 países, y cuya lectura puede realizarse desde aquí.
De las respuestas recogidas, se concluyó que el 96 por ciento de los ejecutivos cree que la convergencia de los mundos digital y físico en la próxima década dará lugar a una transformación de su industria, al tiempo que advierten que las capacidades científico-tecnológicas pueden ayudar a resolver grandes retos de la sociedad, como problemas sanitarios y enfermedades, el 83 por ciento, o la pobreza/desigualdad, el 75 por ciento.
