Vodafone en el Reino Unido ha publicado su Plan Anual de Reducción de Carbono para sus operaciones en ese mercado, destacando un período en el que la compañía dice haber reducido en gran medida su impacto en el medio ambiente. En el lapso de tres años entre marzo de 2020 y marzo de 2023, Vodafone redujo las emisiones de carbono de sus propias operaciones en un 92 por ciento, asegura en su comunicado.
Conocidas como Scope 1 y Scope 2, estas dos categorías abarcan las emisiones de carbono de las operaciones que Vodafone controla directamente, como la energía para alimentar la red y los vehículos que los ingenieros utilizan para visitar sitios móviles. Desde marzo de 2020, la cantidad de emisiones creadas por Vodafone en el Reino Unido se ha reducido anualmente en 86,360 toneladas de CO2, a solo 7,154 toneladas al año, dice Vodafone.
La principal forma en que se ha logrado esto es a través de diversos programas para garantizar que el cien por cien de todo el consumo de electricidad se genere a través de fuentes renovables. Esto se logró por primera vez en julio de 2021.
Vodafone ha logrado esto mediante asociaciones con empresas energéticas, como certificados Renewable Energy Guarantees of Origin (REGO) (REGOs), así como inversiones a largo plazo en granjas solares y eólicas en varias ubicaciones del Reino Unido. En abril, Vodafone anunció que había instalado 720 paneles solares en un mobile telephone exchange en Gloucester. Los paneles producirán alrededor de 240,000 kWh de electricidad renovable al año, suministrando aproximadamente el 12 por ciento del requerimiento energético anual del sitio. Esto reduce la dependencia de la red eléctrica nacional, creando una fuente de energía en el lugar.
Otras iniciativas durante el período incluyen la instalación de un mástil de telefonía móvil autoalimentado en Gales, acuerdos con compañías eléctricas para financiar parcialmente la construcción de nuevas granjas solares y avances hacia la creación de una flota totalmente eléctrica de vehículos para que los ingenieros los utilicen mientras mantienen la red funcionando sin problemas. La última área es el Scope 3, una medida de las emisiones generadas a través de la cadena de suministro de una empresa. Aunque Vodafone no tiene control directo sobre estas emisiones, ha invertido en capacidades mejoradas de informes ESG para mejorar la calidad de los datos y abordar mejor el desafío.
