En la búsqueda constante de sostenibilidad en una era definida por el rápido avance tecnológico, un reciente estudio realizado por la Universidad de California, San Diego, propone una solución innovadora que podría revolucionar la industria de las telecomunicaciones —bueno, no tanto—. Bajo el enfoque de “Densify & Conquer”, los investigadores sugieren que la densificación de estaciones base es clave para reducir la huella de carbono y el consumo energético en las redes de próxima generación, ofreciendo un camino hacia una infraestructura de telecomunicaciones más verde y económicamente viable, dicen.
Las redes de telecomunicaciones consumen una cantidad significativa de energía, algo que todos sabemos y que además se verá enfatizado por la llegada de de una conectividad total. Este consumo no solo proviene de las operaciones diarias sino también del mantenimiento de la infraestructura, particularmente las estaciones base que son cruciales para la transmisión de datos, dice el estudio. Por ello, sugiere que al reemplazar grandes estaciones base con múltiples unidades más pequeñas y ubicadas más cerca de los usuarios, es posible reducir drásticamente la pérdida de señal y, por ende, el consumo de energía. Esta propuesta, fundamentada en simulaciones avanzadas usando el marco de trazado de rayos Sionna, muestra una disminución significativa en el consumo de energía, optimizando el rendimiento de la red mientras se reducen los costos operativos.
Los resultados del estudio son reveladores: implementar una red densificada podría reducir el consumo energético total hasta en un trescientos por ciento y aumentar la duración de la batería de los dispositivos móviles en un cincuenta por ciento. Más allá de los beneficios ambientales, la densificación ofrece una reducción de costos a largo plazo para los operadores de red, quienes enfrentan presiones tanto económicas como regulatorias para disminuir su impacto ambiental.
Adoptar la densificación de estaciones base representa una oportunidad para alinear la industria de las telecomunicaciones con objetivos globales de sostenibilidad, dicen los autores del estudio. Esta estrategia permite a las compañías mejorar su imagen corporativa y cumplir con regulaciones ambientales más estrictas, respondiendo así a la creciente demanda de los consumidores por servicios responsables con el medio ambiente.
La implementación de esta estrategia no está exenta de desafíos, obviamente. La logística de instalar múltiples estaciones base más pequeñas requiere una planificación detallada y podría enfrentar resistencia por el impacto visual en áreas urbanas. Sin embargo, integrando estas instalaciones con infraestructura existente como postes de luz y paradas de autobuses, se puede minimizar su impacto visual, recomiendan.
El enfoque “Densify & Conquer” destaca no solo como una solución técnica viable sino como una estrategia esencial para promover el desarrollo sostenible dentro de la industria de telecomunicaciones. A medida que la sociedad avanza hacia redes más avanzadas como 5G y eventualmente 6G, es crucial integrar prácticas que reduzcan el consumo de energía y la huella de carbono. Este estudio no solo abre un nuevo camino hacia una infraestructura de telecomunicaciones más eficiente y sostenible, sino que también proporciona un ejemplo práctico de cómo la tecnología puede y debe evolucionar en respuesta a los desafíos ambientales globales. El estudio completo puede leerse en este enlace.
