La adopción de la tecnología eSIM continúa su expansión, según los últimos datos revelados por la Trusted Connectivity Alliance (TCA). La descarga de perfiles de consumidores eSIM se ha más que duplicado en 2023, con un aumento del 109 por ciento respecto al año anterior, indicativo de un cambio significativo en la forma en que los consumidores acceden a servicios móviles.
El crecimiento ha sido impulsado principalmente por la adopción acelerada en el mercado norteamericano, donde la disponibilidad de modelos de smartphones exclusivamente eSIM ha llevado a los principales operadores móviles a adoptar estrategias “digitales primero”, dice el comunicado de TCA. Las tasas de adopción también se duplicaron en Asia y Europa Occidental, marcando un notable avance en la aceptación global de esta tecnología.
Se anticipa que el crecimiento futuro en la adopción de eSIM por parte de los consumidores será impulsado por el lanzamiento de smartphones exclusivamente eSIM en más regiones, junto con una mayor disponibilidad de dispositivos habilitados para eSIM, dice. Los niveles de viajes internacionales, que se espera superen los niveles previos a la pandemia en 2024, también contribuirán al aumento de la adopción, ya que los consumidores optan por eSIM por su mayor conveniencia y opciones al viajar.
El aumento general en la adopción de eSIM ha sido apoyado por inversiones significativas en plataformas de Gestión de Suscripciones de eSIM (SM), que permiten la provisión remota y la gestión del ciclo de vida de los eSIMs. El número de plataformas de SM de eSIM para consumidores implementadas aumentó un 25 por ciento en 2023, reflejando el compromiso continuo de los operadores móviles con sus capacidades digitales.
“Para que las tecnologías sean adoptadas ampliamente, deben ser seguras, fiables, ofrecer una gran experiencia y, lo más importante, aportar un valor real”, comenta Bertrand Moussel, presidente del consejo de TCA. “Nuestros últimos datos dejan claro que una mayor disponibilidad de eSIM se traduce en una fuerte adopción, con consumidores de todo el mundo aprovechando los beneficios de una conectividad flexible y sin interrupciones”.
Además de la adopción en el sector de la telefonía móvil, el uso de eSIM también está encontrando un terreno fértil en verticales como la automoción y el internet de las cosas (IoT), apoyado por un incremento del 12 por ciento en la implementación de plataformas de SM de eSIM para M2M, centradas principalmente en casos de uso automotriz, explica TCA.
Mirando hacia el futuro, los esfuerzos de estandarización global, como las especificaciones eSIM para IoT de la GSMA (SGP.31 y SGP.32), jugarán un papel importante en promover una mayor adopción de eSIM a través de los verticales de IoT. Estas especificaciones introducen características dedicadas para satisfacer los requisitos específicos de IoT, simplificando las implementaciones a gran escala y abordando los desafíos asociados con la provisión y gestión remota de dispositivos IoT restringidos.
A pesar de la incertidumbre económica significativa, los volúmenes de eSIM han mostrado resiliencia, comenta TCA en su comunicado. Las presiones inflacionarias globales y la crisis del costo de vida redujeron la demanda general de smartphones y suscripciones móviles en 2023, aunque una inflación decreciente hacia finales del año apunta a un panorama más positivo para 2024.
Con el mercado del SIM ‘tradicional’ igualmente afectado por factores macroeconómicos, con una reducción del soete por ciento hasta los 3.800 millones de unidades en 2023, está claro que estamos presenciando la digitalización acelerada del mercado de SIM, con una adopción creciente de eSIM en regiones clave como Norteamérica.
“A medida que la evolución del ecosistema SIM cobra velocidad, TCA está comprometida a reunir a los interesados para abordar las oportunidades y desafíos emergentes. Al colaborar en iniciativas que aumentan la interoperabilidad, promueven la confianza y apoyan la innovación sostenible en todo el ecosistema de conectividad segura, se puede realizar la plena promesa de la economía digital global”, concluye Moussel.
