Con el llamado a licitación de dos tramos de la Red Federal de Fibra Óptica, comienza formalmente la construcción de la infraestructura de transporte nacional que busca impulsar el desarrollo de banda ancha en todo el país, bajo el ala del Plan Nacional de Telecomunicaciones Argentina Conectada y con la dirección del Ministerio de Planificación Federal, Inversión Publica y Servicios.
Hace algunos días, la Empresa Argentina de Soluciones Satelitales (Arsat) lanzó las licitaciones para dos de las nueve regiones que compondrán la Red Federal de Fibra Óptica: la ruta Patagonia Sur —conformado por las provincias de Chubut y Santa Cruz, que comprende 2007 kilómetros de infraestructura— y el tramo NEA Norte —que atraviesa las provincias del nordeste argentino Formosa, Chaco, Salta, Santiago del Estero y Jujuy en un recorrido de 2.731 kilómetros de fibra óptica—. Ambas licitaciones comprenden 4.738 kilómetros de infraestructura y una inversión estimada de unos 669 millones de pesos argentinos.
El despliegue del tramo Patagonia Sur seguirá el trazado de la ruta nacional 40 desde Bariloche (provincia de Río Negro) hasta Río Gallegos (Santa Cruz) y del gasoducto entre las localidades de Colonia Las Heras y Los Antiguos, ambas en la provincia de Santa Cruz.
El plan prevé el desarrollo de 12.000 kilómetros totales de nueva infraestructura, que se interconectará con redes existentes de operadores de telecomunicaciones y empresas privadas para alcanzar una extensión total de 25.000 kilómetros que conformarán los tramos troncales a nivel nacional y provincial de la Red Federal de Fibra Óptica.
En el sitio de Internet de Arsat también se encuentra disponible la documentación referencial sobre las licitaciones para las regiones Patagonia Norte —que cubre el tendido entre Bariloche y San Antonio Oeste, recorriendo transversalmente la provincia de Río Negro— y NOA (Noroeste Argentino) Sur —que recorre las provincias de Catamarca, La Rioja, San Juan, Mendoza y parte de Córdoba—.
De acuerdo con el diario argentino Página 12, la idea del Ministerio de Planificación es avanzar con la licitación de dos regiones por semana hasta cubrir las nueve regiones contempladas en el plan. Y mientras tanto, ya están firmados los contratos para el despliegue del tendido submarino que unirá a la isla de Tierra del Fuego con el territorio continental, reemplazando los actuales enlaces de radio que los conectan.
Previo al desarrollo de las licitaciones, el Estado ha conducido un relevamiento para determinar dónde se pueden establecer acuerdos con las redes privadas o comerciales existentes, a través de acuerdos de intercambio. Se prevé también que se sumen las redes de fibra de gasoductos y de los tendidos de transmisión eléctrica de alta tensión, con lo que la extensión de la red alcanzaría los 35.000 kilómetros.
Mediante esta infraestructura unificada, Arsat se convertiría en un proveedor de transporte mayorista, de una manera similar a como busca hacerlo Telebrás en Brasil. La comparación no es casual; de hecho, los Gobiernos de Argentina y Brasil acordaron integrar sus redes, en el marco de un convenio bilateral para la masificación del acceso a Internet de banda ancha entre 2011 y 2015. El acuerdo fue celebrado en el marco de la visita de la Presidenta brasileña Dilma Rousseff a Buenos Aires para encontrarse con su par argentina, Cristina Fernández de Kirchner.
Según trascendió, el acuerdo contempla el intercambio de experiencias entre los planes de conectividad de ambos países, así como la integración de las redes, la coordinación de esfuerzos para el desarrollo de un cable submarino en el Océano Atlántico, y la implementación de un punto de intercambio de tráfico en la frontera.
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