La Justicia denegó al Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) una cautelar con la cual el operador estatal buscaba ganar tiempo de cara a la implementación de la portabilidad numérica en el país. El ICE, que según Sutel intentó demorar más de una veintena de veces la portabilidad, ahora busca negociar con el administrador de la portabilidad la inclusión de una cláusula, que condicionaría el cumplimiento del contrato a que el ICE haya finalizado la adecuación de sus redes y que permita dejarlo sin efecto si la Justicia diera lugar a las acciones interpuestas por la empresa.
Mediante la resolución 758/2013, el Tribunal Contencioso Administrativo decidió esta semana rechazar la medida cautelar interpuesta por el ICE, luego de una audiencia pública realizada el 12 de abril, en la que participaron también representantes de la Superintendencia de Telecomunicaciones (Sutel) y los operadores Claro (América Móvil), Movistar y la asociación Consumidores Libres de Costa Rica.
Según una nota de prensa de Sutel, el ICE había justificado su pedido argumentando que la posibilidad de que sus clientes puedan migrar a otros operadores conservando su número telefónico afecta sus intereses. Pero el tribunal determinó que “no se aporta prueba idónea capaz de acreditar en qué consiste el grave e irreparable daño en las finanzas del ICE”, según consta en la resolución.
Ayer, miércoles 17 de abril, el ICE reconoció su derrota en tribunales, e informó que acataría “respetuosamente la decisión judicial y firmará contrato con salvedades. Asimismo continuará ejercitando las acciones judiciales procedentes”, según un breve comunicado.
Pero esa no sería la última carta que jugaría la estatal. Por la tarde del miércoles, el ICE dio a conocer la copia de una carta enviada al administrador de la portabilidad numérica en el país, Informática El Corte Inglés.
En la misiva —que lleva la firma del gerente de Telecomunicaciones, Carlos Mecutchen Aguilar; el gerente de Clientes, Jaime Palermo Quesada; y el gerente general, Martín Vindas Garitta—, el ICE plantea al administrador que “la única posibilidad para que el ICE pueda suscribir dicho contrato sería con la inclusión de una cláusula de condición suspensiva y resolutiva”. Dicha cláusula garantizaría que el ICE pueda cumplir sus obligaciones y que la firma del contrato en los términos establecidos no atente contra el ordenamiento jurídico.
El texto propuesto por el ICE para dicha cláusula es el siguiente: “la eficacia del presente contrato queda sujeta a la siguiente condición suspensiva: que el ICE haya finalizado la adecuación de sus redes y sistemas que permitan la implementación de la portabilidad numérica. De igual forma, la validez y eficacia del presente contrato queda sujeta a la siguiente condición resolutoria: que en sentencia el Tribunal de Juicio competente declare con lugar las acciones judiciales interpuestas por el ICE, en cuyo caso el presente contrato se tiene por resuelto sin ninguna responsabilidad de las partes”.
En su carta, el ICE además deja claro que como miembro del comité de portabilidad, manifestaron en diversas ocasiones su disconformidad, que muchas de sus recomendaciones no fueron atendidas, y que la contratación del administrador o entidad de referencia se realizó “bajo condiciones que el ICE consideró ilegales”.
Ahora, el administrador de la portabilidad numérica y el comité de portabilidad deberán resolver si aceptan o no el planteo del operador estatal.
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