Ser operador móvil virtual en Latinoamérica no es tarea fácil y prueba de ello es que la región fue escenario de salidas de este tipo de actores en los últimos años. Aunque la fórmula del éxito todavía es desconocida es más probable que lo logre quien tenga metas realistas, forme un equipo con conocimiento del mercado a explorar y se concentre en un nicho no atendido para evitar la competencia directa con operadores más robustos. Otra forma viable es ser agregador, una postura que tomó Suma Móvil. La firma proyecta crecimiento en los próximos años, con foco central en Colombia.
Así como lo hace Surf Telecom en Brasil, Suma Móvil nació como habilitador de operaciones móviles en Colombia en 2015. Se presenta como una plataforma que ofrece una alternativa técnica y de negocio para quienes quieran lanzar al mercado su propio servicio de telefonía celular. Permite al cliente “diseñar su propia oferta comercial, personalizar las tarjetas SIM con su imagen de marca, customizar funcionalidades y servicios y disponer de un portal de de autogestión para una operación autónoma”. También promete modelos que minimicen las inversiones y, por lo tanto, el riesgo.
Su operación en Colombia inició oficialmente en 2018 y casi inmediatamente logró sus primeros tres clientes: Conéctame, Comunicamos Más y SIP Móvil. Ahora, según consta en su página oficial, tiene cuatro más. Se sumaron a la lista Wings Mobile, Kalley Móvil, Alai Secure y Unicorn Mobile. Con las incorporaciones la firma está cerca de llegar al objetivo inicial de 10 aliados, como prefiere llamar a sus socios. Entre todos los actuales suman 34.000 líneas en funcionamiento, que equivale al 0,5 por ciento de los 65 millones de usuarios celulares que registra el Ministerio de TIC a junio de este año.
“En enero tendremos una SIM para el desarrollo de Internet de las Cosas (IoT), en febrero está pautada la llegada de un operador de larga distancia que viene al mercado con un producto enfocado en la comunidad migrante y en mayo lanzaremos otra para el sector de transporte, específicamente para una empresa de taxis”, dijo el gerente de Suma Móvil, Miguel Giraldo, en una entrevista con el portal local La República. Con esas incorporaciones el objetivo es alcanzar 200.000 usuarios en total para 2020, cinco veces más que los que presenta en la actualidad.
A pesar de que “el primer año fue duro, la expectativa es positiva porque el mercado ya conoce nuestro modelo y lo acepta”, indicó el ejecutivo que valoró la operación colombiana como la más relevante de la compañía en Latinoamérica. Sigue Chile, país en el que cerró recientemente un acuerdo para el lanzamiento de la pata móvil de Mundo Pacífico, y después México y Perú, sitios en donde no se conocen socios ni expectativas. Hay planes de expansión internacional: “aunque hay que revisar la regulación estamos mirando la posibilidad de entrar en Argentina”.
La operación de Colombia es soportada por la red de Tigo pero la idea es también usar las redes de las otras dos empresas con más usuarios e infraestructura desplegada en el país. “Estamos tramitando con Movistar para poder usar poder usar sus redes a partir del primer trimestre del año próximo. Nuestro objetivo es también buscar un acuerdo con Claro para que antes de que termine 2020”, agregó el ejecutivo.
Suma Móvil confía en su proyecto como argumento para ser optimista con su futuro tanto en usuarios como en facturación en una Latinoamérica que en el último tiempo funcionó más en contra que a favor de la presencia de operadores móviles virtuales. Colombia se mantendrá como su caballo de batalla en esta parte del mundo aunque su principal operación está en España, país en el que cuenta con más de 20 acuerdos con firmas de múltiples rubros. Promete la puesta en marcha de un proyecto en solo cuatro meses y busca nuevos socios para crecer en un modelo que parece tener luz verde en la región.
