La novedad la dio a conocer la Agencia Nacional de Espectro de Colombia (ANE) al aprobar y hacer público el Plan Maestro de Gestión de Espectro (PGME) y trazar los lineamientos a cinco años, con el objetivo de “tener una visión prospectiva a largo plazo de la gestión del espectro radioeléctrico en Colombia para potenciar tecnologías, sectores, mercados y servicios en general”, dijo el órgano en su anuncio oficial.
Hace tres meses, la Comisión de Regulación de Comunicaciones de Colombia había socializado su agenda en un evento del que participó TeleSemana.com, y que -inclusive- había sido puesto en consulta pública. Dicho resultado, forma parte del anuncio de estos días.
El documento presentado expone esos comentarios que la agencia recibió y recogió; y los mecanismos mediante cómo los puso en valor para la formulación de esta estrategia integral en la que se estableció un cronograma de trabajo a cinco años.
Así, a lo largo de una veintena de necesidades concretas, la agencia estableció ese desarrollo, entre las que se encuentran la de “atender la demanda futura de espectro para el despliegue de redes de banda ancha inalámbrica (IMT)”, la de “hacer disponible espectro de banda ancha para soportar la transformación digital de sectores productivos (…)” y la de “dinamizar los sistemas de asignación de frecuencias”, por mencionar algunas de ellas.
“Esta herramienta permitirá hacer una adecuada y precisa planeación del espectro radioeléctrico para identificar y definir con antelación los usos de las distintas bandas de frecuencias con el propósito de programar de manera adecuada las acciones y recursos que permitan la toma de decisiones en pro de una maximización del bienestar social”, expuso la ANE en su web sobre su plan, cuyo contenido puede visitarse aquí.
La consideración del espectro “para construir un modelo económico parametrizable, que valore el costo de la banda IMT disponible que se ha identificado en Colombia y que aún no ha sido asignada” fue otro aspecto de esta iniciativa y la Agencia subrayó que debe tratarse de un modelo económico que incluya a todas las variables necesarias para analizar los diversos casos de uso y mercados de telecomunicaciones (incluidos los de servicios móviles comerciales y privados).
Inclusive, estableció que este modelo de valoración “debe considerar aspectos relacionados con el bienestar social y la definición de tarifas diferenciales para el uso del espectro radioeléctrico en proyectos de telecomunicaciones sociales que faciliten la cobertura e incentiven la inversión de infraestructura en zonas apartadas del país”, entre otros aspectos.
