“La competencia es servicio, no es oferta y regaladera”. La afirmación vino de boca de Luis Bernárdo Pérez, presidente de Digitel, la operadora móvil venezolana que encaró un proceso de transformación y de reorientación del negocio porque la red 3G está colapsada y será necesario reforzar la de 4G para aplacar las incesantes quejas de clientes que se vienen escuchando en los últimos tiempos. También se habló de 5G, pero más de intenciones que de hechos concretos, al menos por ahora. Sí quedó claro que la compañía está embarcada en un profundo cambio de abordaje del negocio en donde se ampliarán las prestaciones y se pagará por cada una de ellas.
La operadora llamó a una conferencia de prensa el pasado miércoles, que tuvo gran convocatoria, la primera desde que se declaró la pandemia, y que fue tomada por la prensa especializada como una nueva era para Digitel. Luis Bernardo Pérez asumió en agosto pasado al frente de la operadora móvil después de cuatro años de haberse desempeñado como vicepresidente y es señalado como el principal responsable de este giro.
La situación de las telecomunicaciones en Venezuela presenta serios retrasos en relación al estado de la industria en la región, que presenta mucho matices. En el caso de Digitel, que a 2019 ostentaba un 25,1 por ciento de participación de mercado, sus redes 3G están colapsadas, y servicios como la larga distancia nacional y el roaming internacional no los aún tiene disponibles. Todo eso tenderá a resolverse a partir de ahora, con los anuncios realizados, y una inversión estimada en algo más de 120 millones de dólares.
¿Y qué anunció Digitel? La operadora móvil, perteneciente al grupo Telvenco, está construyendo un anillo de fibra óptica con una capacidad de 400 GB con la posibilidad de ampliarse hasta un TB a partir de la agregación de cinco circuitos en Caracas para recoger tráfico. Esto permitirá robustecer la plataforma 4G de la compañía y comenzar a migrar a los clientes 3G a esa red.
El plan contempla la migración a la tecnología IP, orientado a dar cobertura 4G al 84 por ciento de la población, un anuncio que se había realizado en 2019 y sobre el que, ahora, se volvió. El core será de Huawei y, en el tren de las mejoras, la perspectiva es implementar VoLTE y disponibilizarlo a finales de 2023. Los equipos comprados llegarán recién al cierre de este 2022 a Venezuela, según consignó Con-Café, uno de los medios especializados de este país.
De acuerdo a lo que pudo reconstruir TeleSemana.com, en la conferencia de prensa se conocieron datos del mercado: sobre un total de 20 millones de líneas móviles, Digitel posee 8 millones de clientes, de los cuales 4 millones están en 4G, 3 millones en 3G y un millón en 2G. Por eso, la necesidad de mejorar el servicio a partir de la migración de clientes.
Justamente, la prensa especializada en telecomunicaciones de Venezuela, al hacerse eco de este encuentro, coincidió en que las llamadas de voz se cortan cada vez más. Y son frecuentes las caídas del servicio móvil, ya no solo de Digitel, sino también de Movistar. Ambas concentran el 90 por ciento del mercado. El restante 10 por ciento se encuentra en poder de la estatal Movilnet.
En cuanto a los servicios, Luis Bernardo Pérez, sostuvo que, a medida que se vaya migrando a los usuarios de 2G y 3G a 4G habrá que abandonar el viejo chip por una e-SIM, que se habilitará la larga distancia nacional e internacional, al igual que el roaming. Que en los próximos días se lanzarán planes de datos y que se sumarán servicios de valor agregado como Netflix, empresa con la que han trabajado en la instalación de una Content Delivery Network (CDN, su sigla en inglés) de alta capacidad para responder a la demanda de streaming. Y aquí fue donde lanzó la frase: “La competencia es servicio, no es oferta y regaladera”, que parece marcar una nueva era comercial en la operadora móvil. El estancamiento de los precios de los servicios ha sido una constante en este país pues la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (CONATEL) es el organismo que autoriza, o no, los incrementos.
En el mismo encuentro, el presidente de Digitel anticipó que ya tienen planes de datos autorizados por el regulador pero que no han salido aún al mercado porque, se preguntó: “¿Quién va a pagar 20 o 25 dólares por 15 o 20 gigas?”, dando a entender que ese es el precio del servicio pero que no toda la población puede hacer frente a ese costo.
La situación macroeconómica de este país es una de las más críticas de la región, con un PBI que se ubicó en 42.500 millones de dólares en 2021 contra casi unos 253.000 millones de dólares que registraba 10 años antes, de acuerdo a datos del Fondo Monetario Internacional (FMI). A esto se suma una inflación constante que en 2021 alcanzó el 686,4 por ciento, según el Banco Central de Venezuela.
El plan sobre el que trabaja la operadora es lo que, hacia el mediano plazo, sentará las bases para avanzar hacia 5G, que también formó parte de los anuncios brindados en la conferencia de prensa pero que, lógicamente, deben tomarse en un escenario donde el punto de partida hoy es migrar a 4 millones de usuarios hacia 4G. Para ello, desde Digitel señalaron que cuenta con 770 radiobases con tecnología 5G desplegada en toda Venezuela además de cubrir por completo el sureste de Caracas.
“Todo el sureste de Caracas tiene 5G, lo que pasa es que no está prendido (…) Para poder tener 5G, primero tenemos que migrar a ese 25 por ciento de clientes que no están en 4G y luego tenemos que tener los switches e instalar los anillos de agregación y desagregación”, apuntó Pérez. Es decir, todavía falta trabajo por hacer para avanzar en la quinta generación móvil que operaría, en principio, en las frecuencias de 800 MHz y 1900 MHz, lo que muestra, además, que no sería una 5G pura.
La cuestión del espectro no es menor. La banda de 700 MHz está hoy ocupada por la TV analógica y, según los medios especializados, CONATEL está limpiando esa frecuencia. Pero, se sabe, son cosas que no se resuelven de un día para el otro.
El cambio de Digitel parece visible. De hecho, también planteó que busca convertirse en una mayorista de fibra óptica de los proveedores de servicios de Internet. “Estamos cambiando la compañía. Ya no somos una empresa de telefonía móvil”, concluyó Pérez. Tampoco una que regala servicios.
