El mapa del acceso a Internet en Perú está mostrando cambios interesantes. Por un lado, crecen las redes basadas en fibra óptica cuyo avance se ubica en un promedio anual de 178 por ciento. Por el otro, hay más prestadores sumándose a este segmento en comparación con años anteriores, lo que dota al mercado de un mejor nivel de competencia, a tal punto que Telefónica dejó de ser la operadora que domina el segmento en el área metropolitana, lugar que cedió a manos de Optical Networks.
En Perú se contabilizaron 3.171.630 de conexiones a junio de 2022, cifra que representó un incremento de 5,21 por ciento en comparación con el mismo período del año anterior, según datos del Organismo Supervisor de Inversión Privada en Telecomunicaciones (Osiptel). Sobre ese total, 875.187 conexiones son de fibra óptica, es decir, casi un 40 por ciento, lo que ubica a Perú entre los países con mejor disponibilidad de esta tecnología, aunque todavía detrás de Uruguay, Brasil y Chile, que ostentan los más altos niveles de la región.
A finales de agosto, el mismo regulador peruano había señalado que el crecimiento de la cantidad de accesos fijos respondía a los hábitos de consumo adquiridos en el mercado de la pandemia y que habilitan nuevos modalidades de acción en el mundo del trabajo, del estudio, del entretenimiento y también en los negocios.
El crecimiento de la fibra óptica alcanzado en junio de este año supone un alza de 89,2 por ciento en la comparación interanual, y si bien este comportamiento se concentra en la zona metropolitana de Perú, es decir, en Lima y Callao -que registró un crecimiento de 149,5 por ciento contra junio de 2021- es notorio el cambio que se produce en un mercado cuando ingresan nuevos jugadores.
El grupo conformado por Optical Networks y Wi-Net lidera el mercado de Internet fija en Lima y Callao al capturar un 44,4 por ciento de participación, relegando de ese primer lugar a Telefónica que, ahora, ostenta un 35 por ciento. La compañía viene desarrollando un agresivo plan de expansión en esta zona, y los esfuerzos parecen estar dando resultados.
Y aunque estas cifras muestras de manera contundente el dominio de dos prestadores, es interesante observar que este retroceso de Telefónica no se explica solo por la avanzada de Optical Networks sino que hay más prestadores ofreciendo el servicio en esta región, tal el caso de Fiberlux y Fiberline cuya participación, si bien es todavía minoritaria, también genera movimientos en el segmento. Claro fue otro que soportó un retroceso significativo al registrar un 6,8 por ciento de participación en este segmento.
“Las medidas regulatorias han contribuido con una mayor dinámica competitiva en el mercado, el ingreso de nuevos proveedores del servicio y el incremento de la oferta de nuevas tecnologías”, señaló el presidente ejecutivo del OSIPTEL, Rafael Muente Schwarz, a través de un comunicado.
Es notorio cómo se modificó el mapa del acceso fijo con Internet de fibra óptica en Perú entre junio de 2021 y junio de 2022. A nivel nacional, hasta junio de 2021, Telefónica contaba con 61,8 por ciento de participación, seguida por Claro con un 16.5 por ciento, y en tercer lugar se ubicaba Wi-Net, con un 13,9 por ciento. La foto se completaba con un 6,2 por ciento atomizado entre diversos prestadores, y la irrupción de Wow, con un 1,7 por ciento de participación.
La cosa transmutó notablemente en 2022. Siempre a nivel nacional, y teniendo en cuenta que se sumaron más accesos de fibra óptica, Telefónica continúa liderando pero ahora con un 42,9 por ciento, seguida por Wi-Net que avanzó hasta alcanzar el 25,2 por ciento de participación, dejando a Claro en tercer lugar, con 14,2 por ciento de share. Wow siguió avanzando hasta alcanzar un 6,2 por ciento de mercado y se hizo visible en escena otro jugador, Fiberlux-Fiberline, que ya ostenta el 2,9 por ciento del mercado. El grupo de proveedores de Internet agrupado en el rubro “Otros”, alcanzó un 8,7 por ciento. En otras palabras, los prestadores medianos y pequeños le están ganando la pulseada a los dos más grandes de la región, Telefónica y Claro. Al menos en Perú.
La foto es similar en el área metropolitana de Lima y Callao, pero aquí es donde, en términos de fibra óptica, termina imponiéndose Optical Networks – Wi-Net. Como se dijo anteriormente, Telefónica, que ostentaba en esta zona un 43,9 por ciento de participación hasta junio de 2021 y lideraba el segmento, soportó una contracción de su share, que se ubicó en el 35 por ciento y fue superada por Wi-Net con un 44,4 por ciento de mercado en junio de 2022, contra un 33,2 por ciento en la medición anterior.
Claro debió resignar casi tres puntos porcentuales en este lapso al ostentar en Lima y Callao un 9,1 por ciento de participación hasta junio de 2021 y ver reducido ese concepto hasta el 6,8 por ciento este año. Fiberlux-Fiberline surgió en el escenario del área metropolitana este año al aglutinar un 4 por ciento de participación, mientras que el rubro “Otros” pasó de un 13,8 por ciento en 2021 a un 9,8 por ciento en 2022. La irrupción de los nuevos explica la caída experimentada de los dos grandes operadoras de telecomunicaciones de la región.
Observar este comportamiento permite vislumbrar un mejor horizonte para Perú en términos de conectividad. La penetración de los servicios de Internet fijo ya superan el 48 por ciento, según el Osiptel. El comportamiento de la fibra óptica que crece de la mano de varios jugadores augura, además, un mejor futuro en términos de calidad. Comportamiento que, también hay que señalar, va en dirección contraria a la marcha de las decisiones que el Gobierno de Perú debe tomar en relación a la Red Nacional Dorsal de Fibra Óptica (RNDFO) que, desde la asunción de Pedro Castillo hace poco más de un año, todavía no encontró la brújula.
