La necesidad de construir y compartir infraestructura se hace cada vez más necesaria en la región, y los sectores de la energía eléctrica y de las telecomunicaciones vienen protagonizando con más énfasis acuerdos que les permitan encontrar puntos en común para favorecer esos despliegues antes que seguir batallando por postes y lugares. Es lo que, ahora, se observa en Brasil donde la Asociación Brasileña de la Industria Eléctrica y Electrónica (Abinee) decidió integrar el Movimiento Antene-se, conformado hace menos de dos años para promover el texto federal de la ley de antenas y, por ende, mejores prácticas para los despliegues de infraestructura.
Como se sabe, esto sucede en pleno despliegue de 5G, donde el proceso iniciado hace algo más de un año ya cumplió su primera etapa con la instalación de antenas en las principales 27 ciudades de este país, y autorizaciones para iniciar la implementación de la infraestructura en municipios de menos de 500.000 habitantes. De hecho, al inicio de esta semana, la Anatel informó al medio Teletime que en breve se autorizaría el uso de la banda de 3.5 GHz para encarar los mismos despliegues pero en localidades de menos de 200.000 habitantes. Esto sucede en un escenario de reciente cambio de gobierno donde, desde el punto de vista técnico, se mantiene lo encarado por la gestión anterior e, inclusive, la designación de algunos funcionarios.
La decisión de Abinee de formar parte de Antene-se coincidió, ahora, con la decisión de 271 municipios brasileños de adherir a la ley de antenas para que las infraestructuras se instalen de manera adecuada. Esto supone que ya se alcanza con esta nueva norma a territorios en donde se asienta el 36 por ciento de la población de Brasil. Se trata de un trabajo de hormiga puesto que en Brasil hay más de 5.000 municipios y a todos ellos se debe llegar con los servicios de energía y de telecomunicaciones básicos y esenciales para la calidad de vida de las comunidades.
Luciano Stutz, presidente de Abrintel, y uno de los oradores que participará del Foro Virtual de Regulación 2023, organizado por TeleSemana.com, consideró que este acuerdo será vital para la industrialización de Brasil pues permitirá incrementar la cobertura y la inclusión digital. “El apoyo de la entidad al Movimiento Antene-se es fundamental para reforzar el trabajo que venimos realizando con los ayuntamientos en la actualización de sus leyes de antenas, que son la base para favorecer el acceso de la población a numerosos servicios ya disponibles en Internet”, dijo el directivo, a través de un comunicado.
Desde Abinee plantearon, justamente, el tema de 5G y de su impacto en distintas áreas de la actividad económica y social. “Este es un paso fundamental hacia la implementación de 5G en el país y esencial para la transformación digital, permitiendo el uso efectivo de la nueva tecnología en áreas como ciudades inteligentes, automatización industrial, agricultura, seguridad pública, telemedicina o educación a distancia”, consideró Humberto Barato, presidente de esta asociación.
Desde su creación en 2021, el movimiento Antene-se ya se ha contactado con más de 500 municipios de Brasil para promover las buenas prácticas en la instalación de antenas y, así, lograr una mayor densidad, básica para ampliar servicios de telecomunicaciones y mejorar la calidad de los que ya se brindan, un aspecto que también resulta básico para reducir la brecha digital.
