El encendido digital de las transmisiones televisivas aún son una promesa en algunas latitudes de la región. Un caso es la Argentina, donde estaba previsto concretarse este año, pero que se reagendó para el próximo. Otro ejemplo es República Dominicana, donde también hubieron reiterados cambios de cronogramas aunque hoy parece entrar en su fase final.
En la Argentina todo estaba dado para que el apagón analógico se concretara este 2023, pero el Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) anunció su aplazamiento para 2024; lo hizo a través del Boletín Oficial local, del pasado 30 de junio, en el que extendió formalmente el cronograma aprobado en el Decreto 156/22 y precisar una nueva fecha límite para el 30 de junio de 2024.
Allí, el Enacom estableció regiones y fechas progresivas para que el proceso de transición de la televisión analógica al Sistema Argentino de Televisión Digital Terrestre (SATVD-T), se concrete en los próximos 12 meses.
Entre los argumentos que motivaron este nuevo aplazamiento, la entidad sostuvo que “distintos actores del sistema” lo solicitaron para poder concretarla con la menor afectación posible a sus usuarios y que identificaron “distintos grados de avance en la transición”; además de recordar que en 2009 se creó el SATVD-T, basado en el estándar ISDB-T y se estableció una década para concretar ese proceso. Con este nuevo plazo -y en caso de concretarse finalmente- el salto evolutivo habrá involucrado 15 años.
En el caso de República Dominicana, la historia de la transición de la televisión analógica a la digital también está plagada de postergaciones, pero esta vez parece que el Instituto Dominicano de las Telecomunicaciones (Indotel) está más cerca de lograrlo. Por estos días, el organismo comunicó la entrega de 450.000 cajas convertidoras de la señal, que tienen por objetivo llegar a aquellos rincones del país donde hay mayores necesidades económicas y hogares en los que aún posean televisores analógicos.
El organismo precisó que esta iniciativa se realizó en el marco del proyecto que ejecuta y que lleva por título Expansión de la Conectividad para la Transformación Digital en la República Dominicana, basado en la obligatoriedad que tiene de garantizar el derecho al acceso universal a los servicios de telecomunicaciones.
Con este fin, Indotel ya invirtió nueve millones de dólares, provenientes de los 115 millones dólares que recibió a modo de préstamo por parte del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Con todo, el plazo vigente hoy para Indotel es el 31 de agosto de 2023.
Todo hace pensar que, esta vez, Indotel lo logrará. Inclusive, si se tiene en cuenta que ya fue pública la aspiración de Nelson Arroyo, presidente del Consejo Directivo del organismo, a subastar el espectro que, ubicado en la banda de 700 MHz, era utilizado para televisión abierta y que ya no se usa: “No se puede tener espectro disponible sin uso, por lo que pondremos a disposición espectro para que los prestadores ofrezcan un servicio más eficiente en favor de los usuarios de las telecomunicaciones”, dijo, en esa oportunidad, el funcionario.
