Si bien los resultados financieros de Nokia y Ericsson brindan algunas pistas sobre la salud del sector de las telecomunicaciones a nivel mundial, es importante tener en cuenta que se trata solo de dos empresas que acumulan, entre ambas, una participación de mercado del 30 por ciento en 2023 y su desempeño no es necesariamente representativo de toda la industria, pero sí puede dar pistas sobre hacia donde se dirige el sector.
Así, una vez cerrado el primer trimestre de 2024, las cifras financieras reveladas por Nokia y Ericsson podrían proporcionar un vislumbre detallado de los desafíos y estrategias en el cambiante sector de las telecomunicaciones. Estos gigantes tecnológicos no solo compiten en un mercado global, sino que también ajustan sus operaciones en respuesta a fluctuaciones económicas y avances tecnológicos. Veamos como está de salud el paciente en base a estos dos indicadores relevantes —Nokia y Ericsson—..
En el primer trimestre de 2024, Nokia enfrentó una notable disminución en las ventas netas, que cayeron un 20 por ciento año tras año, totalizando 4,667 millones de euros. A pesar de este descenso, la empresa logró aumentar su margen bruto comparable en 1,090 puntos básicos hasta alcanzar el 48,6 por ciento. Este aumento es atribuible a una serie de acuerdos de licencia de patentes significativos en su unidad de Nokia Technologies, que también vio un aumento en la tasa anual de ventas netas de licencias de aproximadamente 400 millones de euros. La compañía generó casi 1,000 millones de euros en flujo de caja libre durante el trimestre, fortaleciendo su balance general con un saldo de caja neto de 5.100 millones de euros.
Ericsson, por su parte, experimentó una disminución orgánica del 14 por ciento en las ventas, con las ventas totales reduciéndose a 53.300 millones de coronas suecas (unos 5.207 mil millones de euros). En particular, la región de Norteamérica fue testigo de una dramática caída del 60 por ciento en las ventas debido a una disminución en las inversiones en 5G, aunque se observaron incrementos en India y en otros mercados tempranos adoptantes de 5G. La empresa informó de un aumento en su margen bruto excluyendo cargos por reestructuración, que se situó en 42,7 por ciento, ayudado por una mejor disciplina comercial y mayores ingresos por licencias de propiedad intelectual.
Ambos líderes, Pekka Lundmark presidente de Nokia y Börje Ekholm CEO de Ericsson, comentaron sobre estos resultados con un optimismo cauteloso. Lundmark destacó la mejora continua en la entrada de pedidos, lo que refuerza la confianza en una recuperación y un rendimiento más fuerte en la segunda mitad del año. Ekholm, por su parte, reconoció los desafíos pero también subraya la solidez de la estrategia de Ericsson, enfocada en la eficiencia operativa y la optimización de costos como pilares para superar las adversidades actuales.
Los analistas están atentos a estos desarrollos, observando tanto las cifras como las estrategias de recuperación. Mientras algunos aplauden el robusto margen bruto y la sólida generación de efectivo de Nokia, otros expresan preocupación por la sostenibilidad de estos resultados en un mercado que sigue siendo volátil. Para Ericsson, la evaluación es similar: la fortaleza en ciertos mercados sugiere potencial, pero la caída significativa en Norteamérica plantea interrogantes sobre su posición a largo plazo en uno de sus mercados más lucrativos.
La historia de Nokia y Ericsson en el primer trimestre de 2024 es una narrativa sobre la resiliencia y la adaptabilidad en un mundo tecnológico de telecomunicaciones despiadado. Las decisiones estratégicas que estas compañías están tomando no solo forjarán sus futuros sino que también influirán significativamente en la evolución de la industria de telecomunicaciones. La capacidad de estas empresas para navegar por tiempos difíciles, adaptándose a las rápidas transformaciones del mercado y a las expectativas de los consumidores, será crucial solo para su supervivencia.
