Racsa, filial del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), notificó a la Superintendencia de Telecomunicaciones (Sutel) su deseo de renunciar a 5.713 MHz de espectro ocioso bajo su tutela, informó El Financiero.
Los bloques en cuestión, que incluyen frecuencias para microondas —5.925/6.425 MHz— y el eventual desarrollo de 5G —5.850/6.425 MHz—, serían retornados con el fin de alivianar la carga que implica el pago de su canon de reserva.
En ese sentido, se conoció que Racsa abonó al Ministerio de Hacienda por este concepto 399.485 dólares en 2014, cifra superior a la pagada por Movistar —398.926 dólares—, Claro —343.002 dólares— y otros 129 operadores.
Por su parte, la Dirección General de Mercados del regulador recomendó al Poder Ejecutivo que se inicien formalmente los trámites administrativos necesarios para recuperar las frecuencias resignadas.
Racsa está en el centro de la más reciente controversia del ICE, que demandó a la Contraloría por exceder sus atribuciones luego de que esta revelara los números rojos de su subsidiaria y recomendara cursos de acción para sanearlos.