El año pasado, cuando el operador brasileño Oi solicitó la quiebra, surgieron los rumores de una posible intervención estatal en el concesionario. Pero las sospechas quedaron fuera cuando las propias autoridades brasileñas afirmaron que esperaban una solución de mercado para la empresa y que aún no pretendían ejercer su derecho a intervenir en la compañía.
Con el paso del tiempo, y un operador que no logra llevar al mercado un Plan de Recuperación Judicial que conforme a sus accionistas, la idea de una posible intervención del operador cobra más fuerza. Más cuando el propio ministro de Ciencia, Tecnología, Innovación y Comunicaciones, Gilberto Kassab, señala que “a medida que el tiempo pasa es evidente que la solución es todavía distante o que está habiendo dificultades. El gobierno entiende que, a medida que el tiempo siga pasando, aumenta la chance de intervención”. Las declaraciones fueron realizadas a Agencia Brasil hoy, jueves 6 de abril.
Oi presentó recientemente cambios a su propuesta de Recuperación Judicial junto con sus resultados financieros de 2016, que no trajeron buenas noticias al mercado. La compañía, si bien logró mejorar su flujo de caja, reportó pérdidas por unos 2.300 millones de dólares y un Ebitda menor que en 2015.
En este marco, Oi aún debe decidir sobre las diferentes propuestas de compra, realizadas por fondos de inversión internacionales. Por ahora, la compañía se mantiene ajena a estas propuestas y, en cambio, se enfoca en desprenderse de activos no estratégicos como es la operación de Timor Oriental.
Orascom, del empresario egipcio Sawiris, parece muy interesado en invertir en la compañía y sus acciones indican que no se rendirá fácilmente. A finales de marzo, el fondo señaló que mantiene su propuesta, que ya había extendido en dos ocasiones. La nueva fecha de vencimiento de su oferta será el primero de mayo de 2017. Si Oi continúa sin pronunciarse sobre este tema, ¿estará dispuesto Sawiris a extender indefinidamente su propuesta?.
Mientras tanto, las autoridades brasileñas se preparan en caso de necesitar intervenir. Por ahora, el accionar de la Agencia Nacional de Comunicaciones (Anatel) se limitó a nombrar un representante en el Consejo de Administración de Oi, primero como garante de que la no intervención de Société Mondiale en las decisiones del directorio y, una vez resuelto esta cuestión, como veedor mientras dure el proceso de recuperación judicial. Oi también está obligada a entregar las actas de las reuniones a la Superintendencia de Competencia de Anatel.
El gobierno pretende divulgar en los próximos días una medida provisoria con reglas para realizar una intervención. Kassab afirmó que la medida tiene que ver con un interés del gobierno por crear una legislación más amplia para la intervención en concesionarias, debido a que lo que hoy está sucediendo con Oi, “podría ocurrir en el futuro con otra concesión”.
El ministro se ocupó de señalar que la medida busca generar un marco regulatorio que ofrezca previsibilidad. “El capital privado precisa tener seguridad y no puede estar pensando que el Gobierno puede en cualquier momento intervenir”, señaló. El funcionario apuntó que la medida, al ser amplia, debe ser elaborada “con mucho cuidado”.
Por ahora, las declaraciones de Kassab confirman que si bien es posible una intervención de Oi, la decisión es esperar un tiempo “prudencial” para que el mercado resuelva el problema.
