Con la llegada del Internet de las Cosas (IoT) los operadores ven un campo fértil donde generar nuevos ingresos y desarrollar nuevos negocios. Evidentemente, los operadores no pueden volver a caer en la trampa de pensar que su negocio podrá basarse en la conectividad, a pesar de que inicialmente este será un negocio de fácil explotación y en línea con su negocio tradicional de ofrecer acceso.
Cómo argumenta LeaAnn Carl de Commscope, IoT debería ser mucho más que una red de acceso, sino un sistema de captación e interpretación de datos que sirvan justamente para resolver “cosas”. Porque ser capaz de resolver problemas reales de los usuarios y las empresas parece el mejor camino para poder monetizar nuevos servicios.
Pero recopilar datos puede ser una tarea inútil y costosa si no se sabe qué datos recopilar, y para qué utilizarlos. Estas dos simples preguntas son cruciales para que los operadores puedan aprovechar la basta información que recibirán de dispositivos IoT. ¿Su organización sabe qué datos recopilar, de qué fuentes y cómo utilizarlos?