El gobierno de Venezuela firmó la creación de la Corporación Nacional de Telecomunicaciones y Servicios Postales, compañía que agrupará a las empresas que tienen participación del Estado. La idea, según un comunicado emitido por la administración de Nicolás Maduro, es “articular y ordenar para impulsar las capacidades del país”.
Serán unificadas la Compañía Anónima Nacional de Teléfonos de Venezuela (Cantv), Movilnet, Telecom, Red de Trasmisiones de Venezuela, Comunicaciones Gran Caribe y el Instituto Postal Telegráfico de Venezuela (Ipostel). Al frente de la corporación quedará Jorge Márquez Monsalve, que tiene, entre otros puestos, el de presidente de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel).
Cuesta entender cómo esta decisión cambiará los índices que presenta Venezuela en materia de conectividad. Los últimos datos hablan de una penetración móvil de 68 por ciento contra un promedio regional de 106 por ciento, una participación LTE de 10,2 por ciento —28 puntos porcentuales por debajo del promedio de Latinoamérica—, variación negativa en la penetración de smartphones y aumento de precios.
A modo de referencia de la problemática situación, las últimas tres noticias que se muestran en la página oficial de Cantv, que ahora quedará dentro de la nueva corporación, están relacionadas a recuperación de servicios afectados por vandalismo o fallas en las redes de los operadores. La última buena noticia que llegó desde Venezuela en el plano sectorial es el posible lanzamiento de un nuevo satélite propio, aunque se desconocen fechas y detalles técnicos.
En paralelo, el vicepresidente sectorial de Obras Públicas y Servicios, Néstor Reverol, mantuvo un encuentro con las empresas Cantv, Digitel y Movistar para “impulsar la construcción de un nuevo plan que mejore la funcionalidad de los servicios”. Es habitual este tipo de reuniones pero no han traído consigo resultados positivos a juzgar por la situación actual del país. De hecho, algunas de las reuniones anteriores fueron el paso previo a fuertes discusiones entre Maduro y las empresas privadas, a quienes recomendó “vender sus operaciones al Estado” si no estaban dispuestas a dar un servicio de calidad.
Por último, el gobierno local también comunicó que “ha ordenado las negociaciones pertinentes y la inversión necesaria para potenciar las capacidades y calidad en las telecomunicaciones con Huawei y ZTE para hacer realidad el sistema 4G a nivel nacional”. Las palabras son de un Maduro que tiene una batalla pública con Estados Unidos y sus autoridades, por lo que solo quedará responder la pregunta de si el país tiene o no los recursos para invertir.
Así las cosas, Venezuela avanza a pasos mucho más cortos que los deseados en la idea de acomodarse y empezar a avanzar en soluciones de problemas que otros ya no tienen. Maduro aprovecha para colar su lucha política con Estados Unidos y expresa apoyo a Huawei mientras los operadores se reúnen cada tanto para hablar de precios y mejoras que, al momento, no llegan a los usuarios.
