La filial chilena de América Móvil firmó acuerdos con dos de los concesionarios de la Fibra Óptica Austral (FOA) y utilizará el tendido como “complemento de su red con la que actualmente ofrece servicios de Internet fijo y móvil”. El foco de la compañía está puesto en Magallanes, región en la que según estudios el 85,8 por ciento los habitantes usa Internet.
La red de Fibra Óptica Austral consta de cuatro tendidos. Los tramos terrestres Los Lagos y Aysén están en manos de Silica Networks mientras que el de Magallanes está a cargo de Conectividad Austral. En tanto, del tendido submarino se ocupa Comunicación y Telefonía Rural (CTR). Con los dos últimos firmó contrato Claro por, al menos, seis años.
La novedad se conoce justo después de que autoridades de CTR admitan que solo estaba en uso el uno por ciento de la capacidad de la red submarina, proyecto que le fue adjudicado en 2017. Está en manos de la empresa llegar a acuerdos y hasta el momento solo había logrado dos contratos con el operador local Entel.
“Esta alianza nos permitirá brindar una mejor conectividad a la zona sur del país. La pandemia ha dado cuenta de lo relevante de la tecnología para las personas y las organizaciones. Un proyecto como este apunta a mejorar los accesos a servicios y, como consecuencia, a reducir la brecha digital en el país”, dijo el director Legal y Regulatorio de Claro Chile, Cristián Salgado.
La compañía destacó que fue la primera en llegar a la región Magallanes con fibra a través de Argentina y consideró que este acuerdo le permitirá optimizar la experiencia de clientes locales. También le será útil para “ampliar la oferta de Planes de Internet Hogar a precios convenientes en el mediano plazo, teniendo un impacto directo en sitios como Punta Arenas y Tierra del Fuego”.
