Justo después de que los accionistas de Oi aprobaron el plan estratégico que seguirán en el corto plazo, que incluye venta de segmentos divididos en cinco negocios, Highline aclaró que mantiene su interés por quedarse con algunos de ellos. Lo confirmó el ministro de Comunicaciones, Fábio Faria, tras mantener conversaciones con ejecutivos de la compañía.
“Ellos tienen interés de entrar en Brasil porque son inversionistas de infraestructura y torres. Aunque los tres operadores (Vivo, Claro y TIM) fueran vencedoras (de los activos móviles) y estén interesadas en ofertar juntas por la parte de infraestructura”, dijo el funcionario en declaraciones tomadas por el portal local Teletime.
Highline había llegado, en agosto, a un acuerdo con exclusividad por la pata móvil de Oi pero casi inmediatamente llegó una oferta superadora de los competidores del mercado celular. Mantiene, al momento, preferencia para la compra de la unidad de torres, por la que ofertó 1.066 millones de reales (200 millones de dólares) e interés por ser el socio buscado para el segmento de infraestructura InfraCo.
Luego, Faria se mostró confiado sobre el proceso de recuperación judicial que sigue Oi. Dijo que el operador se muestra “saludable” y que le consta que está en conversaciones con la Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel) para llegar a un acuerdo sobre las deudas que mantiene. El gobierno, concluyó, ve con buenos ojos su intención de cambiar números actuales por azules.
Los últimos anuncios marcan que la empresa abrirá licitaciones para el desprendimiento de los cinco segmentos (móviles, torres, infraestructura, data centers y televisión vía satélite) en el segundo semestre de 2021 y podría concretar las operaciones en la primera mitad del año siguiente.
