Mientras los despliegues 5G avanzan con características y velocidades distintas en los países del mundo, la Next Generation Mobile Network (NGMN) publicó su primer white paper sobre la futura evolución de las redes, la 6G, en la que definió cuáles serán los drivers que impulsarán la transición entre ambas tecnologías y sobre qué ejes se asentará ese proceso con la mirada puesta en 2030-35. Esto sucedió a menos de una semana de que se diera a conocer el proyecto Hexa-X en Europa mediante el cual comenzarán a definirse las necesidades que deberán resolver las futuras redes.
Se trata del documento “6G drivers and vision”, versión 1.0, liderado por Quan Zhao, de China Mobile, Narothum Saxena, de US Cellular, y David Lister, de Vodafone. El paper contó con la contribución de Bell Canada, BT, China Mobile, Deutsche Telekom, NTT, DoCoMo, Orange, PSDT Smart, TIM, TELUS, US Cellular y Vodafone, además del aval de 20 operadores de telecomunicaciones del mundo. Es decir, están hablando los operadores, por lo que el ecosistema debe prestar atención.
Allí se explica que, en un momento en donde se están encarando los despliegues comerciales de 5G y la transformación digital de la industria se encuentra en su etapa inicial, es necesario darle continuidad a la evolución que supondrá tanto 5G como, más adelante, 6G.
En este sentido, la visión sobre 6G expresada en el informe aborda la evolución de las redes con servicios diferenciados que se expanden en nuevas oportunidades de mercado. Por ello, hace una primera aproximación sobre los drivers en los que se basará 6G teniendo en cuenta las necesidades de los usuarios, las sociedades y los operadores móviles, y con ellas los estándares y tecnologías que deberán desarrollarse.
A la hora de definir las motivaciones y los drivers para 6G, el paper —que se puede descargar desde aquí— destacó que la industria móvil debe apuntar a satisfacer tres necesidades básicas de la sociedad: los desafíos vinculados con la sostenibilidad, la provisión de servicios y capacidades que redunden en costo-beneficio, y el desarrollo de redes más eficientes.
En este informe se declara, inclusive, que cualquier desarrollo futuro de tecnología debería contextualizarse en términos de cuánto puede ayudar a la sociedad, a los usuarios finales, y a los operadores móviles a crear valor y distribuirlo.
En cuanto a los objetivos sociales, la expectativa es que jueguen un rol importante en el tratamiento de los desafíos sociales, como la sostenibilidad ambiental considerada a partir de la implementación tecnologías para ciudades inteligentes, la distribución de servicios para la salud y la reducción de la pobreza y la inequidad, entre otros. Por esa razón, la ciberseguridad, la resiliencia ante eventos inesperados de distinto tipo —naturales o informáticos, entre otros—, el impacto de la industria de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC), la eficiencia energética y la inclusión digital se imponen como factores sobre los cuales trabajar.
En relación a las expectativas de mercado, la transformación digital sobre la que se avanza, y que tendrán un impulso mayor a partir de 5G, obligará a las industrias a identificar un rol cuantificable y diferenciado para cada nueva tecnología. Los desarrollos tendrán que orientarse a impulsar servicios diferenciados, a expandir oportunidades de mercado y a cumplir las expectativas de servicio.
Sobre las necesidades operacionales, gestionar redes cada vez más complejas con eficiencia y menores costos quedó en evidencia con 5G y se profundizará con 6G. En ese marco, la industria deberá focalizarse en la automatización de sistemas end-to-end, la visibilidad de esos mismos sistemas, y su gestión eficiente. La utilización avanzada de espectro, el monitoreo de la eficiencia energética y la gestión integrada de funciones de seguridad, entre otros, aparecen en el conjunto de tópicos sobre los cuales trabajar.
El white paper sostiene que, en la medida en que se cumplan las expectativas sobre estos tres ejes, se podrán generar progresos a nivel sanitario, en la experiencia del cliente y en la gestión de redes de telecomunicaciones más autónomas y eficientes.
Y enfatiza que el éxito de la futura tecnología dependerá no sólo de fijar los estándares de la industria sino también em re-evaluar cómo esos estándares y tecnologías son desarrolladas.
En cuanto a las consideraciones de desarrollo, la nueva generación móvil deberá tener un abordaje y un desarrollo holístico, señala el documento. Razón por la que apuntó que, antes de desarrollar la nueva tecnología, habrá que considerar una serie de aspectos, a saber: necesidad de un mayor alcance para los objetivos de desarrollo sostenibles; de un paradigma de evolución de nuevos estándares; de unificar e integrar los estándares globales; de ir hacia una evolución tecnológica diferenciada; y de contar con diversidad y seguridad en la cadena de suministros.
La visión de 6G apunta a desarrollar nuevas capacidades que permitan superar fronteras, desarrollar nuevos modelos de negocios y potenciales nuevos paradigmas todavía desconocidos. El abordaje de 6G debería basarse en sistemas más flexibles y ágiles con inteligencia distribuida en el borde.
Más adelante, la NGMN subraya que, en la medida en que satisfaga las expectativas vinculadas con los desafíos sociales, 6G habilitará una experiencia más ubicua y de continuidad de servicios. La sostenibilidad estará dada por la adopción de tecnologías verdes y la eficiencia energética. El abordaje holítico del ecosistema completo deberá incluir estándares globales, diseño de ecosistemas, monitoreo y estrategias de desarrollo que involucren asimismo al diseño final y que permitan la actualización, la reusabilidad, la reparación y el reciclado a fin de extender su vida útil.
En ese sentido, los responsables del paper recomiendan e insisten en priorizar los siguientes aspectos: abordar las necesidades sociales y ambientales, que contemplen prosperidad e inclusión, como también avanzar en los facilitadores de la transformación digital a partir de la expansión de oportunidades diferenciadas.
Por esa razón, considera que es necesario introducir nuevas interfaces humano-máquina que extiendan la experiencia de usuario a través de plataformas virtuales, y otras opciones.
También, avanzar en la facilitación de servicios continuos a través de redes terrestres y no terrestres que den cobertura en la tierra, el mar y el cielo de manera eficiente.
Pié de página: Los invitamos a leer “China avanza a alta velocidad en el desarrollo de 5G”, porque la coyuntura de avance tecnológico previsto para 6G sólo es posible por el gran avance que 5G desarrolló en mercados como el chino.
