El MWC 2022 de Barcelona mostró que la asociación será el modo de enfrentar los negocios de la nueva era, marcada por la digitalización y prácticas más sustentables en lo ambiental y lo financiero. Esto parece haber inspirado la nueva joint-venture creada entre Telefónica España y Repsol que se dedicarán al negocio del autoconsumo voltaico, es decir, un servicio orientado a la gestión energética del hogar. ¿Qué tienen que ver las telecomunicaciones en esto? Pues parece que mucho.
La nueva empresa se dedicará a brindar soluciones integrales de autoconsumo voltaico, es decir, instalación, monitoreo, mantenimiento, asesoramiento y otros servicios de valor vinculados con la gestión energética del hogar, es decir, a no despilfarrar energía, porque es cada vez más cara. No es la primera vez que Telefónica encara una asociación con Repsol: ya a principios de 2021 se habían involucrado em un consorcio orientado a impulsar la industria 4.0 en España.
Este nuevo abordaje de cara a los clientes les permitirá producir su propia electricidad renovable, libre de emisiones de CO2 y, así, generar ese ahorro prometido. Este acuerdo alcanzado en España se produce en un momento en que la energía tuvo un incremento que fue desde los 89 centavos de euro el megavatio a principios de 2021 (luego de que la tormenta Filomena disparara su precio hasta los 105 euros) hasta valores que oscilan entre los 200 y los 300 euros, ahora con el impacto adicional que la invasión rusa a Ucrania genera en el mercado de los combustibles, donde Europa importa el 90 por ciento de lo que necesita.
¿Cómo operará este joint-venture? Repsol aportará su experiencia vinculada con el autoconsumo y la multienergía en España, lo que permitirá ofrecer una tarifa eléctrica exclusiva que complemente a su instalación fotovoltaica. Y aquí es donde entrará Telefónica: ya inserta en el hogar a través de los servicios de telecomunicaciones, la operadora aportará la capilaridad de sus canales y la distribución, además de brindar una conectividad diferencial al mercado. Es decir, será un servicio combinado de energía más conectividad al que se sumarán prestaciones de valor orientadas a modificar ciertos comportamientos relacionados con el consumo y la generación de la energía.
Esto supondrá el uso de una aplicación móvil mediante la cual se controlará la instalación y, así, se optimizará el gasto energético que, a su vez, sumará una financiación personalizada a cada tipo de consumidor de acuerdo a sus uso y a lo que surja de la instalación de los paneles solares que producen la energía fotovoltaica.
Tal vez aquí resida uno de los aspectos más interesantes de los servicios que brindará la nueva compañía: la cuestión energética será a medida de las necesidades de los clientes. Para ello, habrá un equipo dedicado específicamente al asesoramiento y sobre cuál es la mejor instalación a incorporar, incluido aquellas cuestiones relacionadas con la generación de energía y los servicios posventa.
La oferta comercial del combo energía sustentable más conectividad saldrá una vez que la nueva empresa obtenga las autorizaciones regulatorias pertinentes. Y se pondrá en marcha en el principal mercado de Telefónica lo que permite vislumbrar que, una vez que se vayan teniendo las primeras evaluaciones de esta nueva oferta, posiblemente en otros mercados, sea con el mismo socio o con otro, similar, especializado en el sector energético. Más allá de que el costo de la electricidad aumentó en el último año de una manera exponencial en España, la cuestión energética está en la agenda de todos los países y el impulso de comportamientos sustentables se impone en todos ellos.
Repsol cuenta con más de 3.700 MW de capacidad total instalada de generación de bajas emisiones. La compañía suma 1,35 millones de clientes de electricidad y gas, siendo un actor relevante en este mercado en España, informó la nueva empresa a través de un comunicado. En 2021 Repsol fue la única gran comercializadora del país, por volumen de clientes, que obtuvo la Etiqueta A de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) sobre el origen respetuoso con el medio ambiente de la electricidad que suministra. En lo que se refiere a la generación de energía eléctrica renovable, uno de los pilares de la descarbonización de Repsol, se han actualizado los objetivos de capacidad instalada en 2030 hasta alcanzar los 20 GW, lo que supone un incremento del 60 por ciento frente a la meta anterior. En 2025, la capacidad instalada aumentará hasta 6 GW.
Telefónica es uno de los principales proveedores de servicios de telecomunicaciones del mundo, con más de 365 millones de clientes distribuidos entre Europa y América latina, y desde 2019 viene realizando fuertes movimientos en su estructura y en su organización, orientados a mejorar los indicadores económico-financieros al tiempo que dar lugar a una compañía más ágil que responda a los requerimientos del mundo digital.
“Este es un acuerdo estratégico entre dos compañías líderes que aportan su conocimiento en dos aspectos fundamentales para construir una propuesta de valor sólida e innovadora, tanto para particulares como para empresas; por un lado, la conectividad, y, por otro, la instalación y gestión de paneles fotovoltaicos para aprovechar la energía solar. Nuestros clientes, además de gestionar eficientemente su gasto y ahorrar, contribuirán a crear una sociedad más sostenible”, dijo Emilio Gayo, presidente de Telefónica, en el marco del anuncio.
Por su parte, María Victoria Zingoni, directora general de cliente y generación baja en carbono de Repsol, sostuvo que “esta importante asociación muestra la apuesta de ambas compañías por el consumidor, que cada vez más quiere ser partícipe de la transición energética produciendo su propia energía”.
Será interesante ver la evolución de este caso y cómo se comportan la ciudadanía frente a la propuesta comercial. La industria tiene en su agenda el desarrollo de prácticas sustentables basadas en el mejor consumo energético, pero hasta ahora no se había ido más allá de la introducción de estas pautas.
