Telefónica emitió un bono senior sostenible por 1.000 millones de euros con el objetivo de financiar proyectos medioambientales relacionados con la transformación de las redes y su impacto en la eficiencia energética a un plazo de nueve años.
Esta emisión, conformada con un cupón de 2,592 por ciento, con vencimiento en mayo de 2031 logró un nivel de suscripción 2,5 veces superior a lo ofertado originado en unos 150 órdenes de compra conformada por una base inversora muy diversificada. La operadora interpretó esta demanda como parte del éxito de esta nueva emisión con la que supera, así, los 10.000 millones de euros de financiación bajo criterios de sostenibilidad.
La compañía informó a través de un comunicado que estos fondos servirán para “financiar inversiones en proyectos verdes y sociales, que podrán ser de nueva creación o ya finalizados, en este caso con una antigüedad no superior a los dos años, a contar desde la emisión de hoy”, es decir, de este miércoles 18 de mayo.
En relación al enfoque medioambiental, la compañía informó que los proyectos que cubren estos fondos están orientados a la mejora de la eficiencia energética gracias a la transformación de las redes de cobre hacia redes de fibra y al despliegue de la tecnología 5G. Con respecto a los proyectos sociales, la compañía busca destinar financiación a la aceleración del despliegue y mejora de la conectividad de banda ancha en zonas rurales con el objetivo de impulsar la conectividad inclusiva, por un lado, y de estimular el emprendimiento y la generación de empleo, por otro.
Con esta emisión, son ya cinco las colocaciones en formato ESG (verdes y sostenibles) que Telefónica ha realizado en los últimos tres años, desde el lanzamiento del primer bono verde de la industria en enero de 2019, y al que siguieron un instrumento híbrido verde (2020) y dos instrumentos híbridos sostenibles, uno en febrero de 2021 y otro en noviembre del mismo año. Asimismo, en enero de 2022, la compañía refinanció su principal crédito sindicado de 5.500 millones de euros bajo criterios medioambientales.
Telefónica trabaja con el objetivo tangible de conseguir cero emisiones netas en 2040, con un plazo de consecución intermedio en 2025 para Brasil, Alemania y España (Alcance 1+2). Cuenta igualmente con los objetivos de ayudar a sus clientes a evitar con soluciones digitales 12M tCO2 al año en 2025, y de alcanzar cero residuos en 2030. Precisamente los despliegues de fibra óptica y de infraestructura 5G como parte de la transformación de las redes, junto con los planes para extender la energía renovable, son clave en la consecución de estos objetivos. Así, la fibra óptica pasa por ser un 85 por ciento más eficiente en términos de energía, y el 5G lo es en hasta un 90 por ciento con respecto al 4G, en cuanto a consumo de energía por unidad de tráfico
