Inteligencia artificial, 5G, el desafío de la innovación y la política de la conectividad en Colombia fueron algunos de los temas que se abordaron en el Foro Iberoamericano de la Convergencia y el Audiovisual (FICA) 2023, que se desarrolla esta semana en el marco de Andinalink, y en cuyo marco, Sandra Urrutia Pérez, titular del Ministerio de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (MinTIC) de Colombia, destacó que “incrementamos los recursos que están disponibles para las convocatorias, de 26.000 millones de pesos colombianos ((5,4 millones de dólares) para el año pasado, a 32.000 millones (más de 6.7 millones de dólares) para este”, dijo y anticipó que “en abril ya empezaremos a conectar al país”, en una estrategia que involucra el protagonismo de los proveedores de Internet comunitarios (ISPs).
La estrategia que la funcionaria presentó se llama “Conecta TIC Visión 360”, que está aprobada y que forma parte del plan de desarrollo y en la que se precisa que “la tecnología no es un privilegio, es un derecho” en el que trabajarán todos los sectores, en un país que ya aprobó más de 63 millones de dólares (300.000 millones de pesos colombianos) para financiar a sus cinco lineamientos principales de conectividad para 2023.
“Que la tecnología sea un derecho nos da un marco normativo muy poderoso y que el presidente Gustavo Petro dejó muy claro al establecer que la tecnología es la herramienta que nos ayudará a hacer el cambio de las tecnologías extractivas a la economía de la producción; algo que permea a todos los sectores” dijo la funcionaria y admitió que “por todos lados vemos la transformación digital”, al tiempo que caracterizó la brecha digital del país y precisó las estrategias que llevarán adelante.
“Colombia no está conectada al 100 por ciento, porque no hemos logrado llegar con conectividad a todos lados o porque quienes tenemos acceso no lo usamos para la productividad” dijo Urrutia y precisó que, al 2021, tenía una capilaridad del 60,5 por ciento y que el índice de brecha digital (IBD) -que desde 2018 mide habilidades digitales, conectividad, aprovechamiento y motivación- evidenció que aún resta de apostar al trabajo colaborativo de todos los sectores.
En cifras, esto significa que sólo el 28,9 por ciento de la población rural está conectada y que sólo el 11,5 por ciento de ellos lo hace desde una computadora. A su vez, y en lo que la población urbana refiere, se identificó que el 73 por ciento accede a Internet y que, de ellos, sólo el 31,8 por ciento lo hace desde su computadora, mientras que el 90,9 por ciento recurre a su celular.
“En este gobierno de la esperanza nos propusimos pasar del 60 por ciento al 85 por ciento de brecha y, aunque ¿por qué ahora sí va a pasar? Porque no siento que esté sola, están ustedes (N de R.: dijo en relación a la presencia de la industria) que me ayudarán”, apostó y advirtió que “tenemos que mejorar la continuidad del servicio y su calidad, porque percibimos un deterioro de la actividad cuando uno se aleja de los centros y de las áreas urbanas”.
“Algo que me pidió el presidente es que la conectividad que hagamos tiene que ser con apropiación y para la productividad, por eso el reto es enorme”, admitió la ministra TIC y adelantó que trabajarán con la industria móvil para resolver la conectividad de aquellas zonas donde la brecha fue estimada como media y baja, pero también una estrategia regional focalizada con todas las tecnologías que mejor se adapten a cada región y las características de su territorio.
La compartición de infraestructura, la importancia de que las obligaciones de hacer por parte de los operadores pasen del 60 por ciento al 90 por ciento, la posibilidad de tomar decisiones en relación al manejo de espectro cuando los operadores no den “buen uso”, son algunas de las disposiciones que incorporaron para facilitar este achicamiento, con la inclusión, además, de herramientas como la educación híbrida, por ejemplo, para que las poblaciones rurales no tengan que abandonar sus lugares para poder formarse.
El mensaje de la ministra TIC también apuntó a la industria, en relación al cumplimiento responsable de, por ejemplo, las normativas y a las que otorgó un plazo de seis meses, con el afán de poder, luego, acceder a convocatorias y fomentos que se lanzarán para avanzar con aquel plan de conectividad regionalizada; entre otros lineamientos.
El despliegue de conectividad involucra dos grandes estrategias, una nacional, que está destinada a los operadores telcos de fuste; y la regionalizada mediante la que prevé impulsar a los pequeños proveedores, en muchos casos, ISPs comunitarios para los que escriben una regulación que los alcance por considerarlos tributarios del “verdadero servicio universal”, y precisar cómo se distribuyen a lo largo del territorio nacional.
Así, Urrutia anunció que elaboran la incorporación de una nueva reglamentación, vinculada al servicio comunitario de Internet fijo, en la que se establecerán lineamientos como las características que debe tener la prestación y la obligatoriedad de inscribirse en el Registro Único de TICs para conseguir su habilitación, entre otras exactitudes.
“La visión 360 es llevar la conectividad, pero también el aprendizaje y la alfabetización para que los colombianos vean que la conectividad cambia vidas”, destacó Urrutia y destalló que prevén la oferta de capacitaciones técnicas en los territorios.
Nicolás Silva Cortés, comisionado presidente de la Comisión de Regulación de Comunicaciones (CRC), también fue parte de la mesa y destacó que el reto actual pasa por “promover el bienestar de los ciudadanos a través de la conectividad” y aseguró que la industria, los gremios, las asociaciones y el Estado están comprometidos en el cierre de la brecha digital.
“Hemos venido creciendo: en 2014 teníamos cinco millones de conexiones a Internet fijo, en 2018 llegamos a seis millones y en 2022 a 8,7 millones y es importante, pero nos falta, y somos conscientes y estamos alineados con la política pública” dijo Silva y aseguró que trabajan en lograr las metas de achicamiento de la brecha digital, sobre todo en las zonas rurales y apartadas del país.
“Como regulador, seguimos haciendo esfuerzos significativos por el impulso al despliegue de infraestructura” dijo y destacó que identificaron la existencia de barreras que buscan subsanar.
“El foco, más allá del despliegue de infraestructura, es que los usuarios puedan contar con conectividad de calidad, independientemente donde se ubique” dijo Silva Cortés y recordó que hace un año lanzaron el comparador de tarifas, disponible desde cualquier dispositivo para evaluar las alternativas disponibles.
Miguel Felipe Anzola, director general de la Agencia Nacional de Espectro (ANE), por su parte, subrayó que la política de espectro, “que fue trazada recientemente, está orientada para maximizar el bienestar social” a través de la conectividad y que la apropiación y uso de Internet y de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TICs) como consecuencia de la sanción de la Ley de Modernización, y subrayó que “el espectro radioeléctrico es un habilitador para las comunicaciones”. Así, el foco está puesto en garantizar la eficiencia, la simplificación y la búsqueda activa de trabajar con todos los sectores del país (educativos, productivos, entre otros) para que “puedan contar con las frecuencias que necesitan, pero sobre todo cuando lo necesitan”.
“Buscando aumentar la cobertura a nivel nacional, el gobierno colombiano busca facilitar ese despliegue de conectividad y, para ello, hablamos del uso del espectro no licenciado”, precisó Anzola y lo valoró como un aporte del Estado para garantizar la asequibilidad del acceso y del avance de la transformación digital.
En esta mesa, cuya presentación se encuentra disponible aquí, Luz Marina Arango, presidenta de Andinalink, aprovechó para anunciar que el proyecto Quebrada Negra, por el que se llevará Internet a 1.500 niños de una zona remota de Colombia, ya cuentan con la infraestructura necesaria para que, en tres meses, se culmine el tendido de fibra óptica que les permitirá conectarse.
