En un escenario de pleno resurgimiento de la industria satelital, uno de sus protagonistas, Hughes se posiciona como uno de los principales referentes del sector a nivel regional. La compañía brinda servicios en distintos países de América latina y, ahora, se encuentra a la expectativa del lanzamiento del Jupiter 3, que ampliará la disponibilidad de capacidad satelital. Mientras tanto, avanza con el diseño de servicios de valor y la integración de las diversas prestaciones porque hay certeza de que la demanda de capacidad satelital continuará creciendo. Para aprovechar su paso por Buenos Aires, en el marco del LATSAT 2023, TeleSemana.com conversó con Ramesh Ramaswamy, vicepresidente ejecutivo y gerente general de Hughes International quien dio su perspectiva sobre lo que ser verá en esta industria en los próximos tiempos.
¿Cuál es el estado del acuerdo que tiene Hughes con Arsat en la actualidad?
La relación es una de las más importantes que tenemos, es muy buena. Tenemos una sociedad que nos permite seguir creciendo y trabajando con ellos, para proveer infraestructura para el Arsat 1 y estamos proveyendo actualizando las prestaciones a medida que llega la nueva generación de gateways. Un par de años firmamos un acuerdo para brindar servicios en algunas áreas de Mendoza y vamos a continuar expandiendo ese proyecto. Además, cuando lancemos otro satélite en un par de meses, habrá mucha más disponibilidad de capacidad sobre la Argentina y estamos en proceso de analizar proyectos futuros. Lo que tenemos con Arsat es una relación constante.
¿Qué pisada tiene Hughes en América latina y qué servicios brinda en la región?
Fuera de Estados Unidos, América latina es el mercado más grande. Estamos en seis países: Brasil, Colombia, Perú, Chile, Ecuador y México. Y proveemos servicios en todos ellos. En países como Argentina no brindamos servicios de manera directa por la relación que tenemos con Arsat. Pero en los otros, tenemos una gran base de consumidores, de 300.000 usuarios y ofrecemos servicios para backhaul, telefonía móvil, cualquier tipo de prestaciones B2B o también para escolares como es el caso en Colombia o Perú.
¿Cuál es su mirada sobre la industria satelital? ¿Hacia dónde va cuando hoy el mercado está atravesado por diversas fusiones además de la explosión de las constelaciones LEO?
Es muy positiva. La razón es que la demanda de conectividad satelital está creciendo cada vez más, es un negocio de mucha demanda. Si analizamos todas las capacidades vemos que nosotros somos un eslabón de la cadena. Hay mucha capacidad, pero esto es solo un elemento. Muchos ven que sobre eso es necesario generar soluciones para consumidores, empresas e integramos la tecnología satelital a estas alternativas. El mundo es una gran puerta abierta en esta nueva era que se muestra con mucha expectativa por lo que se viene con la conectividad satelital directa al teléfono. Hay mucho para seguir avanzando por lo que se avizora con perspectiva positiva. Sobre la segunda parte de la pregunta, está claro que no vamos a tener 50 jugadores. Habrán fusiones y adquisiciones y habrán muchas partes interesadas que van a brindar muchas tecnología y van a habilitar muchas sociedades. Y si tenemos todo esto, en este contexto, vamos a seguir produciendo pero es necesario tener espalda y capacidad para mantenerse en este mercado.
¿Por qué vendrá mayor demanda de capacidad? ¿Por los mayores despliegues de 5G, por la transición hacia transformación digital o por ambas cuestiones?
Es muy simple. La mitad del mundo aún no está conectada. Y hay otro sectores, como el de la aviación aerocomercial, donde no hay conectividad para los usuarios. Es un proceso similar al que, por ejemplo, se dio hace años con la hotelería donde el costo para conectarse ascienda a 20 dólares y eso cambió… Estos costos que ha tenido la conectividad en algunos sectores ya no podrá seguir siendo así, habrá demanda de banda ancha porque las personas quieren estar conectadas en todos lados. A esto sumamos también las escuelas… Las tecnologías tienen que seguir desarrollándose y expandiéndose en las mismas áreas que hoy están disponibles. Esto nos permite avizorar que se van a seguir agregando capacidades en esta industria.
En relación a las comunicaciones de directas de celular a satélite, ¿es posible ponerle una fecha a la disponibilidad masiva de estos servicios?
Técnicamente ya es posible. En tres o cuatro años ya será más común. Puede ser que surjan diversos servicios a medida que pase el tiempo pero que un usuario cualquiera quiera mantener esa comunicación, en cuatro años será posible.
