Iusacell y Nextel protagonizaron un desenlace pocas veces visto en el conflictivo mercado mexicano que nos tiene acostumbrados a interminables confrontaciones legales, amparos y apelaciones.
Ambas compañías –enfrentadas por la licitación 21– decidieron terminar sus disputas legales y competir en el mercado, según informó Excelsior.
“Ante el entorno complicado que se augura en el mercado internacional, consideramos que el ambiente de litigios no convenía a ninguna de las dos compañías y determinamos desistirnos de toda querella”, indicó Gustavo Cantú, vicepresidente ejecutivo de Nextel.
En tanto, desde Iusacell explicaron que “ambas empresas coinciden en que en México, la industria de telecomunicaciones y los consumidores requieren más, mejores servicios y precios más competitivos, que sólo pueden ser producto de un entorno de certidumbre, competencia sana e igualdad de condiciones para todas las empresas que prestan este tipo de servicios”.
“Hoy la concesión de Nextel para ofrecer servicios de telecomunicaciones queda firme, y con ello habrá una nueva oferta para los usuarios”, concluye el comunicado oficial Iusacell.
Ante el acuerdo entre los operadores –del que no se conocen los detalles de fondo-, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) agradeció que los concesionarios hayan acordado retirar los recursos legales interpuestos en torno a la Licitación21.
“Con la eliminación de los juicios se concretarán las inversiones necesarias para el despliegue de las redes, fortaleciendo así la capacidad de los operadores para la prestación de los servicios móviles, en un entorno de certidumbre jurídica”, celebró la SCT.
Hasta hace pocos días, la batalla legal entre las compañías parecía no tener fin luego de que Iusacell consiguiera que un juez federal dejara sin efectos los títulos de concesión otorgados a NII Digital, consorcio integrado en su momento por Nextel y Televisa, y que ahora sólo tiene como único integrante al primero de ellos.
Este último era sólo otro intento por frenar el despliegue de Nextel, en el historial de cuestionamientos a las condiciones en las que había sido licitada la banda de 1.7 Ghz.