Telefónica, de forma sigilosa, discontinuará su servicio OTT “Clip It” que ofrecía un servicio de mensajería de video donde sus clientes en O2, Reino Unido, y usuarios de terceros podían grabar mensajes de video de un minuto. El servicio permitía enviar los video mensajes a usuarios con número telefónico en el Reino Unido o a la casilla de cualquier usuario de Facebook en el circulo de amigos del usuario. El servicio contaba con una aplicación dedicada para iOS y Android que permitía ver y enviar los mensajes que también se podían visualizar desde otras aplicaciones o un navegador.
La aplicación se realizó con la tecnología de Six3, que nació del programa Wayra del propio Telefónica, una cantera de start ups que permite al operador contar con una cuna de nuevos innovadores. El servicio se lanzó a mediados de diciembre para usuarios iOS y Android y, según reportes de prensa, siempre estuvo en fase de pruebas, por lo que los ejecutivos Telefónica no consideran que estén cerrando un servicio, simplemente no pasó el periodo de pruebas o fase “beta”.
Para muchos este cierre será considerado un nuevo fracaso de Telefónica Digital, parecido al sufrido con la aplicación de mensajería OTT Tu Me, que se lanzó con la idea de competir contra WhatsApp y acabó enterrada debido a su baja adopción, algo parecido a lo que le ha sucedido a Clip It.
Pero este nuevo “fracaso” en realidad esconde una lección mucho más importante: el operador se empieza a comportar como un verdadero OTT. Google es conocido por sus servicios exitosos, y muchos desconocen que por cada servicio exitoso, Google discontinúa 10 que no llegaron a cuajar entre los usuarios. Justamente esto es lo que hace de Google una empresa tan exitosa y ágil, la posibilidad de lanzar rápidamente un servicio al mercado y borrarlo como si nunca hubiese existido, todo ello con una estructura de costos que le permite entrar en esta dinámica constantemente.
Clip It se ha discontinuado, pero son pocos los que se han enterado. Con Wayra como intensificador de nuevos servicios, una estructura de mayor virtualización (NFV) y servicios en la nube, Telefónica Digital demuestra que empieza a tener ese dinamismo que necesitan los operadores para encontrar aquellos servicios que tendrán éxito. Y aquí es donde Telefónica tiene una ventaja contra otros operadores y, quien sabe, si también contra los propios OTTs.
Hace un tiempo dijimos que esperábamos que Telefónica Digital no se convirtiera en un generador de “chatarra OTT“, y quizá haya que crear mucha para dar con aquello que deja de serlo. El ejemplo de Tu Go parece indicar esta situación, por cada dos o tres que dejan de funcionar, Tu Me o Clip It, aparece uno que funciona y puede exportarse a todas las filiales.
