La semana pasada, el operador Iplan anunció una inversión de 1.000 millones de pesos (unos 65 millones de dólares) para los próximos tres años en el despliegue de una red de fibra óptica directa al hogar (FTTH) y en el lanzamiento de nuevos servicios para clientes residenciales de la Ciudad de Buenos Aires.
Tras el anuncio —que incluyó la presentación del proyecto al propio presidente de la Nación, Mauricio Macri—, el gerente General de la compañía, Damian Maldini, dialogó con TeleSemana.com sobre el reposicionamiento de Iplan y sus perspectivas para el mercado residencial.
Iplan era, hasta ahora, un operador de telecomunicaciones enfocado en los negocios de servicios corporativos y pymes, ¿por qué ahora apuestan por el mercado residencial?
Nosotros nacimos como una empresa con foco en las pymes, que con los años se transformó hacia el negocio más corporativo. Hace tres años nos dividimos en tres unidades de negocios: pymes, grandes cuentas y negocio mayorista. Tenemos alrededor de 17.000 clientes, y de ellos el 10 por ciento es grandes cuentas. Esto ya nos dio cierta estructura para encarar negocios que antes no estábamos preparados para encarar.
Asi que, por un lado, tenemos la maduración de la compañía que en 17 años pasó de ser una start-up a una empresa consolidada. Por otro lado, la tecnología evolucionó y nosotros hemos invertido muchísimo en transformar nuestra red a fibra óptica, y hoy tenemos fibra óptica desde el centro de operaciones hasta la oficina u hogar del cliente. Nuestra topología de red es de punta a punta fibra óptica.
Y como tercer punto, la demanda del mercado maduró de manera tal que una oferta residencial de Internet de alta velocidad es lo suficientemente atractiva y tiene la suficiente fuerza para poder romper un bundle de triple play, algo que hace algunos años era impensado.
Decías que el mercado está lo suficientemente maduro para un servicio de banda ancha ultrarrápida, sin embargo, una red FTTH solo para banda ancha parece ser demasiado, ¿tienen previsto montar otros servicios por encima de la red de fibra?
No, nosotros tenemos el servicio de telefonía softphone y podríamos darlo junto con la banda ancha. Pero no, la verdad que nosotros lo que apostamos es darle una autopista al cliente de mucha velocidad y calidad, y él elegirá los servicios de terceros que quiera montar por esa autopista. Querer controlar la oferta total de servicios es muy complejo y hoy los clientes acceden a contenidos de Internet de maneras muy variadas.
¿Cuál es la cobertura de la red actual?
Nuestra red tiene más de 1.000 kilómetros. La parte troncal está sobre las arterias principales de la Ciudad de Buenos Aires. Lo que comenzamos a hacer, en esta primera etapa, es a desplegar lo que sería el área de distribución, es decir, empezamos a salir de las avenidas y estamos llevando la fibra a cada una de las manzanas que están alrededor de esas troncales.
¿En qué zonas está el servicio disponible actualmente?
El proyecto completo es hacer el despliegue de la red para cubrir un tercio de la población de la Ciudad de Buenos Aires. Esa es la inversión de los 1.000 millones de pesos (65 millones de dólares) que hemos anunciado.
Empezamos por la zona norte de la ciudad, en los barrios de Recoleta, Palermo y Belgrano, allí ya hay conectadas cerca de 20 manzanas. El resto del despliegue se va a ir acomodando en función a la demanda y las decisiones de nuestra área de ingeniería.
¿Cuál es el objetivo en materia de cantidad de clientes?
Tenemos el objetivo de aquí a fin de año de 500 clientes habilitados. Ese es el primer objetivo concreto, y el plan de negocios habla de una penetración como porcentaje de penetración del total de mercado. Nosotros creemos que hay un 20 por ciento del mercado que puede ser cliente de este servicio. Y cuando ves la cantidad de hogares por donde podríamos pasar con la red, estamos hablando de cerca de 60.000 o 70.0000 clientes, aunque no es un número exacto.
Estamos en un momento donde se está discutiendo una nueva ley de telecomunicaciones y, pareciera, que los operadores están a la expectativa en materia de inversiones, ¿cómo ven el mercado?
El mercado está mucho más movido de lo que estuvo en los últimos cinco a seis años, pero es cierto que todavía no están claras las condiciones para que se tomen todas las decisiones que haya que tomar en una empresa. Todavía está dando vuelta gran parte de las definiciones que hay que tomar, entre ellas las que tienen que ver con licencias y frecuencias para operadores móviles, que es una de las cosas que nosotros estamos interesados.
Pero la realidad es que hay una cantidad de legislación y puntos que se han abierto en los últimos meses que no se veían en los últimos cinco a seis años. Vemos mucha actividad en lo que se refiere a la gestión de las inconsistencias y desigualdades que hay en las regulaciones para intentar ajustarlas a la revolución tecnológica.
Recién comentabas que les interesa el negocio móvil, ¿pretenden conseguir espectro para montar una red móvil o quieren operar como operador móvil virtual?
Nuestra intención es ser un operador móvil real. Lo cierto es que para eso suceda las condiciones tienen que ser otras.
Por empezar, tendría que abrirse una licitación de espectro…
Claro, tenemos que tener frecuencias. Pero, fuera de eso, la realidad es que lo podríamos hacer perfectamente, no hay barreras por el lado de inversiones.
Sin embargo, montar una red móvil desde cero no es nada fácil y ustedes no tendrían sitios para las torres…
Nosotros estamos acostumbrados a realizar inversiones entre 20 y 30 veces más caras que nuestra competencia, que utiliza cableado aéreo —N.d.R: Iplan cuenta con fibra soterrada en la Ciudad de Buenos Aires—, así que sabemos cómo trabajar en condiciones desiguales. Tenemos red de fibra óptica ya desplegada, por lo que habría solo que buscar los lugares para montar las torres. No creo que haya un problema en ese sentido. Una vez superado el escollo regulatorio, no habría problema en cuanto al despliegue de la red.
Todavía no ocurrió en Argentina, pero cuándo los operadores comienzan a desplegar fibra al hogar (FTTH), en otros mercados se empieza a pensar en la necesidad de desagregar esa red, ¿estarían dispuestos a compartir el acceso de fibra al hogar?
Si hubiese otro operador que pone red de fibra y la comparte no tendría ningún problema, pero la verdad que eso no ocurre. Yo hoy no conozco ningún otro operador que tenga planes de fibra con inversiones similares a la nuestra. No se trata sólo de los 1.000 millones de pesos anunciados para los próximos tres años, sino que en los últimos tres hemos invertido una cifra similar en todo lo que fue el replanteo de nuestra red actual.
Trabajo hace 23 años en telecomunicaciones y la única vez que vi inversiones de red similares fue cuando se lanzaron las redes celulares, porque todo lo que hicieron las incumbentes en este tiempo fue explotar su red de cobre. No hay inversión porque el marco regulatorio no propicia la reinversión. Entonces llega un momento que la evolución de la demanda genera un quiebre y nos permite a empresas como nosotros encontrar ese espacio.
