El Plan Social de Desarrollo Digital tiene la firma de la Subsecretaria de Telecomunicaciones (Subtel) pero la idea es que múltiples carteras que son parte del gobierno de Chile trabajen en conjunto para cumplir los desafíos del país en materia de conectividad. La propuesta cuenta con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y, aunque todavía no se detalla cómo, también buscará consenso de actores privados y el sector académico.
“Estamos trabajando en muchas propuestas sociales en telecomunicaciones y este plan nos permite coordinarnos con actores multisectoriales que tienen mucho que aportar en materia de desarrollo digital, brindando soluciones que alancen a todos los ciudadanos locales. Hoy la no conectividad es una forma de marginalidad y esta propuesta es clave para seguir reduciendo la brecha digital”, dijo al respecto la subsecretaria de telecomunicaciones Pamela Gidi.
La propuesta se divide en cuatro propuestas con objetivos particulares que contarán con el apoyo de carteras como el Ministerio del Desarrollo Social, Ministerio de Relaciones Exteriores, Ministerio de Educación, Ministerio de Defensa, Ministerio del Interior, la División de Gobierno Digital y la Corporación de Fomento de la Producción, entre otros. El BID funcionará como secretario técnico y “ayudará a articular el proyecto”, comunicó el gobierno.
En el apartado inclusión digital se busca generar iniciativas en materia de conectividad e infraestructura que promuevan la inclusión para reducir la brecha y colaborar con la iniciativa privada para fomentar las competencias digitales. En ningún caso se explica cómo se van a lograr esas metas, entre las que también aparece, por ejemplo, la ejecución de medidas de alfabetización y desarrollo tecnológico en al menos dos localidades más para antes que termine el año y seis para marzo de 2020.
En cuanto a innovación para la igualdad social la propuesta es impulsar el ecosistema de emprendimiento 5G y fomentar casos de uso al tiempo que busca “identificar zonas geográficas del posible uso de la tecnología 5G”. Se trabajará en la ejecución de un piloto 5G con impacto social en una propuesta marcada para abril de 2020. En estos casos, las iniciativas contarán con apoyo de Subtel, el Ministerio de Economía y la Corporación de Fomento de Producción.
El tercer ítem es “fomento a la inversión de infraestructura en telecomunicaciones”. Aquí aparece la necesidad de reducir las trabas regulatorias para el despliegue y contar con un Plan Nacional de Espectro Radioeléctrico en concordancia con estándares internacionales para el primer trimestre del año que viene. También se generará un inventario de infraestructura pública pasiva para el despliegue de 5G, en un plan que deberá haberse completado en unos siete meses.
Dentro de la cuarta propuesta, ciberseguridad, entran cuestiones como protección de datos e impacto de la tecnología 5G en la seguridad de instituciones públicas y privadas. Este apartado tiene casi una decena de integrantes, entre ellos la cartera de Defensa, del Interior, de Relaciones Exteriores y la subsecretaria de Hacienda. Entre las metas puntuales se indica que se harán modificaciones al Plan Nacional de Ciberseguridad durante el segundo trimestre del año próximo.
Chile trabaja en dejar listos sus pendientes para poder transitar de forma ordenada su camino a 5G. En los últimos días definió topes dinámicos de espectro y antes de eso resolvió la polémica en torno a la banda de 3,5 GHz y los tres operadores con más usuarios (Entel, Claro y Movistar) definieron cómo devolverán espectro tras la resolución en su contra en la adjudicación de espectro en 700 MHz. Ahora, confía en la colaboración como otra herramienta para lograr sus objetivos en materia de conectividad, ¿los logrará?
