El Consejo Director de la Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel) aprobó una serie de alteraciones regulatorias con el ojo puesto en fomentar el desarrollo de Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés) y las comunicaciones máquina a máquina (M2M). La definición más relevante es que quedó escrito que los servicios prestados por dispositivos IoT tendrán que soportar una carga tributaria más baja que las de telecomunicaciones.
El reglamento establece que “son considerados dispositivos de Internet de las Cosas aquellos que permiten exclusivamente la oferta de servicios de valor agregado basados en sus capacidades de comunicación, detección, desempeño, adquisición, almacenamiento y/o procesamiento de datos”, con lo que deja de manifiesto que no serán alcanzados por los mismos gravámenes que afectan al sector.
“La tributación de los dispositivos IoT es una guía y un punto clave para el éxito de todo el ecosistema digital que incluye dicha tecnología en su cadena de valor”, señaló el consejero Vicente Aquino. Otras especificaciones quedarán definidas en los requisitos técnicos. Según la legislación de cada municipio, este servicio de valor agregado puede ser susceptible del impuesto al servicio (ISS).
Adicionalmente, el regulador aprobó que los operadores virtuales (MVNOs) puedan cerrar contratos con más de un proveedor de origen y usufructuar acuerdos de roaming y de uso de radiofrecuencias con esos prestadores. También dio 180 días para la presentación de un estudio sobre roaming para Internet de las Cosas y que analice la posibilidad de incluir el tema en la futura agenda regulatoria de Anatel.
Brasil presentó el plan de Internet de las Cosas a mediados de 2019, tras cuatro años de un debate. “Se pretende dar más certeza y seguridad jurídica para implementar soluciones con más eficiencia y previsibilidad”, indicaron por entonces las autoridades. También puso tres verticales como prioridades: agroindustria, salud y ciudades inteligentes. Creó luego una cámara de gobernanza por una de ellas, que se agregaron a la Cámara de Industria 4.0.
