La Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) continúa profundizando su incursión en 6G. Aunque en 2019 lanzó la licencia Spectrum Horizons THz, que identifica a las frecuencias que van entre los 95 GHz y los 3 THz, recién ahora, en 2022, comenzó a otorgar las primeras licencias a Qualcomm y Samsung.
Se trata de los primeros otorgamientos orientados a explorar nuevas posibilidades de cara a la próxima generación móvil. Samsung y Qualcomm han recibido licencias para experimentar con frecuencias ubicadas por debajo de los terahercios con el objetivo de desarrollar nuevas tecnologías para las comunicaciones inalámbricas.
Samsung recibió su licencia experimental en diciembre de 2021, y podrá hacer uso de ella hasta enero de 2024. En este lapso realizará pruebas sobre un sistema de comunicación inalámbrica 6G que contará con un transmisor y receptor de matriz en fase que simulará una estación base celular y un dispositivo móvil
La prueba se efectuará en la banda de 133-148 GHz, en la localidad de Plano, en Texas, sobre un radio de 500 metros. “La prueba de extremo a extremo es para verificar la viabilidad de la comunicación celular de largo alcance en el espectro sub-Terahertz, en términos de cobertura, rendimiento, latencia, capacidad de dirección del haz”, dijo la compañía en la solicitud elevada a la FCC.
¿Por dónde pasaría la innovación? Por probar la matriz en fase de alto rendimiento a partir del uso de fosfuro de indio (InP), un semiconductor inorgánico compuesto. Esto daría lugar a la formación de haces adaptables a las frecuencias portadoras de terahercios y en un modo completamente digital, lo que permitiría admitir sistemas de comunicación multihaz.
Del lado de Qualcomm, se supo que la compañía recibió su licencia en enero de 2022 y que expirará en febrero de 2024. El objetivo en este caso es desarrollar nuevas tecnologías de sistemas de comunicaciones inalámbricas para el rango operativo de 132,5-147,5 GHz en SanDiego, California.
La empresa hizo saber que los experimentos incluirán prototipos de transmisores y receptores. “Los transmisores de mayor potencia serán fijos y ubicados en interiores y exteriores. Los dispositivos móviles operarán dentro del rango de cobertura del transmisor. La transmisión BW (ancho de banda) se compone de cuatro subportadoras a 2,5 GHz, cada una de las cuales utiliza modulación OFDM (Multiplexación por división de frecuencia ortogonal). Los transmisores de sitios fijos utilizarán conjuntos de antenas de dirección de haz”, detalla Qualcomm en un documento que respalda su aplicación, y que fue dado a conocer por 6G World.
Lo que deja en evidencia esta fase que ha iniciado de manera concreta Estados Unidos es que todo que tenga que ver con investigación y desarrollo de esta tecnología está involucrando cada vez más a los gobiernos. Y que si 5G terminó de dar lugar a una dura batalla comercial en donde también tiene su impronta la geopolítica, el avance hacia 6G va a profundizar esta situación.
Estados Unidos quiere avanzar con un grupo de trabajo 6G, tal como ya lo ha hecho la Unión Europea que hace casi un año inauguró la iniciativa Hexa-X, empresa en la que también viene haciendo lo suyo Japón y, lógicamente, China que a esta altura ya está primereando en el registro de patentes 6G.