La Unidad Reguladora de Servicios de Comunicaciones (Ursec) publicó el primer borrador del “Proyecto de Pliego de Bases y Condiciones para la subasta de espectro en la banda de 3.5 GHz”, y recibe comentarios hasta el próximo lunes 13 de febrero, aunque esta tarde se realizará una reunión informativa de carácter presencial. En la antesala a este debate ya se sabe que los operadores privados como Movistar y Claro la cuestionaron, aunque otros la consideran una “alfombra roja” para los privados.
El llamado surge como consecuencia del Decreto 425/2022 que, emitido el 27 de diciembre de 2022 por el Poder Ejecutivo, exhortó a que la Ursec creara, en un plazo máximo de 30 días, el documento que posibilite licitar el espectro para 5G; y cuyo documento en proceso de trabajo y realizado por el Grupo de Trabajo (GT) interno del regulador puede observarse aquí.
La propuesta prevé poner a disposición del mercado tres lotes en la banda de 3.5 GHz: el EA01, que va del 3300 al 3400 MHz; el EA04, del 3600 al 3700 MHz; y el EA05, del 3700 al 3800 MHz. Sin embargo, aclara que el EA04 “se reserva a favor de Antel y su asignación se hará una vez culminada la fase competitiva, en los mismos términos, condiciones y plazos fijados en el pliego”.
En esta misma línea aclara que el operador público abonará por ese lote “al hacerse efectiva su asignación, el promedio de los valores que resulten del procedimiento competitivo de los lotes EA01 y EA05 en caso de ser subastados. En caso que uno o ambos lotes no resulten asignados, para el cálculo del promedio se adoptará el valor de la oferta mínima inicial”.
En sus 50 páginas, el documento establece los criterios de base como que la oferta mínima inicial es de 28 millones de dólares por cada lote de 100 MHz, y que podrán participar aquellas empresas que posean una autorización para prestar servicios de comunicaciones móviles o sean precalificados para el caso, tras cumplir requisitos como dos años de antigüedad en la prestación de servicios de telecomunicaciones móviles internacionales en, al menos, dos países de América del Norte, Central o Sur y/o Europa; entre otras.
Otro aspecto relevante involucra las obligaciones de despliegue, en cuyo caso se precisa que habrá requisitos mínimos a cumplir. Por ejemplo, “que comiencen a operar en tecnología 4G y/o 5G” y “que operen en condiciones satisfactorias de continuidad y calidad y en forma parcial o total en cualesquiera de las bandas de frecuencias radioeléctricas en las cuales ostenten con asignaciones”. Así, establece que al cabo de un año, se habrán debido desplegar 70 estaciones de base en el territorio nacional; que a los dos años cuenten con al menos dos estaciones de base en al menos 10 departamentos del país, exceptuando Montevideo; y que al finalizar los tres primeros años se hayan implementado al menos dos estaciones de base en cada departamento. Su incumplimiento prevé la multa de 10.000 dólares por cada estación base faltante.
Para los operadores, las condiciones establecidas son “exigentes”, manifestaciones que fueron replicadas por la prensa local. Sin embargo, fuentes en off dijeron a TeleSemana.com que se trata de un borrador creado como “una alfombra roja” para que Movistar y Claro puedan acceder.
La consulta pública se inscribe en un escenario en conflicto y transición, tanto porque las reglas de juego comienzan a cambiar para el operador público, por ejemplo, en materia del negocio de banda ancha al hogar; como porque hace dos meses Dedicado desplegó una red de alta capacidad con tecnología de Ciena, que le posibilita ofrecer 5G aunque se multiplicó el debate acerca de si estaba (o no) autorizado para hacerlo. Y en ese sentido, cabe señalar que fue desestimada la participación de Dedicado en esta convocatoria.
Lo cierto es que la reunión que se realizará esta tarde, sumada a los comentarios que se presenten hasta el lunes próximo, ofrecerán al regulador las herramientas para concluir con el documento que posibilite licitar esta porción de espectro en el país que hizo punta de lanza en el tema, al haber lanzado 5G en 2019 y erigirse primero en la región. Sin embargo, todavía hay mucho por hacer.
