SpaceX desplegó los primeros satélites Starlink con capacidades de conexión directa a celulares, marcando un paso importante para la iniciativa Coverage Above and Beyond de T-Mobile. Esta alianza, anunciada el año pasado, tiene como objetivo llevar conectividad a casi todos los rincones de Estados Unidos para los clientes de Un-carrier, incluso en áreas remotas previamente inalcanzables por las señales celulares tradicionales de cualquier proveedor, también conocidas como zonas muertas.
Con estos satélites en órbita terrestre baja, comenzarán pruebas de campo para el nuevo servicio que aprovechará la constelación de satélites de SpaceX con tecnología Direct-to-Cell y la red móvil de T-Mobile.
“La misión de T-Mobile es ser el mejor del mundo conectando a los clientes con su mundo, y hoy es otro paso adelante para mantener a nuestros clientes conectados incluso en los lugares más remotos para brindarles tranquilidad cuando más lo necesiten”, dice Mike Katz, presidente de marketing, estrategia y productos de T-Mobile.
El servicio tiene como objetivo cubrir más de medio millón de millas cuadradas en Estados Unidos y vastas extensiones de océano inalcanzables por la cobertura de redes terrestres debido a limitaciones de terreno. Esta nueva oferta busca proporcionar a los clientes una capa adicional de conectividad cuando y donde más la necesiten, dice el comunicado del operador.
Inicialmente, el servicio comenzará con mensajería de texto, con cobertura de voz y datos que se implementarán en los próximos años. La visión compartida entre T-Mobile y SpaceX es proporcionar una cobertura verdaderamente universal y, como muestra de ello, emitieron una invitación abierta a proveedores inalámbricos en todo el mundo para expandirse globalmente con roaming recíproco.
Cinco proveedores de telefonía móvil ya se han unido para lanzar la tecnología Direct-to-Cell, entre ellos KDDI de Japón), Optus en Australia, One NZ de Nueva Zelanda, Rogers en Canadá, entre otros