El crecimiento en el tráfico de datos en las redes 3G ha pillado desprevenidos a los operadores de todo el mundo que han visto que con la llegada de dispositivos como el iPhone sus redes se congestionaban debido a la alta demanda de servicios de datos. Mientras los operadores migran a redes de transporte de siguiente generación y lanzan tecnologías con mayor capacidad espectral, la implementación de políticas de control en estas redes se ha convertido en un elemento fundamental para poder hacer frente a la demanda de los servicio de valor agregado (VAS) que utilizan tráfico de datos así como para maximizar el ingreso proveniente de estos servicios.
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