BCN2017 LATAM SUMMIT – “La transformación digital es necesidad, no lujo”. Con esa frase concluyó su presentación en BCN 2017 Sonia Agnese, analista senior de Ovum. Habló de la importancia de la conectividad en la “segunda revolución industrial” y los desafíos de los operadores para ser parte activa del ecosistema, que moverá 4,8 billones de dólares en 2025.
Los cambios en las necesidades de los clientes hacen que cada vez haya más actores involucrados en la industria y los operadores deben ser certeros en sus decisiones para prevalecer en el mercado. También tienen que ser conscientes de sus limitaciones y considerar las alianzas como una oportunidad, todo esto sin perder el foco: siempre pensar en el consumidor.
Agnese hizo referencia a los cambios en la configuración de alianzas de operadores con OTTs: mientras que en el primer semestre de 2015 música, social media y video ocupaban casi en partes iguales (20 por ciento cada uno) de los acuerdos entre operadores y OTTs, en la última mitad de 2016 el video concentró el 39 por ciento de los acuerdos y se ubicó como clara prioridad para los operadores de la región.
La maduración del mercado y la mayor competencia va a traer nuevos retos a los proveedores de servicio, que no sólo deberán ocuparse de estar a tono con la demanda, sino de otras cuestiones, como factores económicos, políticos y sociales, además de las cuestiones regulatorias, cerró Agnese.
En su participación en el evento, José Otero, director para América Latina y el Caribe de 5G Americas, hizo énfasis en la realidad que vive la región en términos de penetración y abundó sobre lo complejo que resulta, en este contexto, el negocio para operadores entrantes y virtuales.
Al cierre de 2016 había 683 millones de líneas móviles en la región y en cuatro años se espera que el número llegue a 741 millones, de las cuales un 56 por ciento serán LTE, destacó Otero sobre la base de datos de Ovum. La participación de esta tecnología crecerá más de tres veces, si se compara con el 16 por ciento registrado al cierre del año pasado.
La penetración supera el 100 por ciento en la mayoría de los países, con picos de 170 por ciento en Panamá. “Un suscriptor es rentable luego de dos años y dos meses de servicio”, agregó Otero como prueba de lo complejo que resulta para los entrantes hacerse fuerte en mercados consolidados. A la inmensa cantidad de costos que deben contabilizar, indicó, se suma la dificultad para generar valor agregado y servicios diferenciales para poder competir.
Sin embargo, existe un costado que se vuelve positivo para las expectativas por el mal panorama actual. La cantidad de espectro entregado en Latinoamérica está muy por debajo de lo recomendado y se preparan nuevas licitaciones en la región, que abre las puertas a cambios en la configuración de los distintos mercados.
En este sentido, dijo que “entregar espectro ayuda a los que ya están y los que quieren estar” y tildó este punto como una de las conclusiones de su presentación, entre las que también destacó la importancia del despliegue de fibra óptica y de “controlar las expectativas para poder promover el sano desarrollo del sector en Latinoamérica y el Caribe”.
