La adquisición de Nextel por parte de Claro en Brasil se anunció hace casi tres meses pero todavía resta la aprobación de las autoridades para que se convierta en realidad. Una semana atrás el Consejo Administrativo de Defensa Económica (CADE) avaló la participación de los competidores del mercado móvil como terceros interesados en el proceso y ahora se conocieron detalles del parecer de cada uno: Telefónica y TIM están, como ya habían manifestado, en contra mientras que Oi ve la operación como un movimiento natural del mercado.
Telefónica pidió que la Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel) también sea consultada en esta etapa del proceso y consideró que la compra generaría tres riesgos potenciales. El primero es un incremento significativo en la participación del resultante en San Pablo y Rio de Janeiro. Su argumento es que en algunos puntos de esos Estados el operador pasaría de tener 19,8 por ciento a 27,1 por ciento de cuota. En otros, su participación pasaría al 44,3 por ciento, lo que elevaría en índice de concentración (HII) hasta en 287 puntos.
Por otra parte señaló que traería problemas en cuanto a la infraestructura de torres, indicó TeleSintese. En este punto, el operador recomendó ampliar la investigación y consultar a empresas especializadas en el tema sobre los efectos secundarios que podrían generarse, tales como desbalance en la competencia. En el último punto, Vivo coincidió con TIM en que también habrá consecuencias adversas en materia de espectro, considerando además que Nextel subutiliza parte de su activo en la actualidad.
TIM, que hoy tiene 1,1 millones de usuarios móviles menos que la filial de América Móvil, habló directamente de duopolio: “Gran parte del mercado estaría efectivamente concentrada entre solo dos prestadoras (Claro y Vivo), las cuales controlarían de forma combinada casi el 70 por ciento del mercado en las citadas unidades federativas (UF)”, expresó en su documento.
Sobre el espectro, opinó que existiría una alta concentración que de ninguna manera podría ser alcanzada por cualquiera de los competidores en el corto o mediano plazo. Además, observó problemas de competencia en el mercado de torres, de larga distancia nacional (LDN) y en el acuerdo de sharing entre Telefónica y Nextel, según el mismo portal.
Oi, que en un primer momento se mostró preocupada por la transacción, presentó una posición a favor ante CADE. Dijo que la compra se justifica como parte de movimientos lógicos de mercado. Claro podrá ampliar su oferta de servicios y posicionarse mejor frente a 5G, que demandará muchas inversiones, dijo a TeleSintese. Solo fue pública una parte del documento del operador, por lo que el resto podría contener algunos contrapuntos sobre la operación.
Si supera las pruebas, América Móvil se quedará con Nextel y sus subsidiarias por 950 millones de dólares. Por ese dinero se hará de espectro en las bandas de 1900/2100 MHz, 1800 MHz y 800 MHz que le permitirá mejorar sus prestaciones principalmente en San Pablo y Río de Janeiro. También le aportará unos 3,4 millones de usuarios. Ambos confían en que la transacción se cerrará antes de fin de año pero la presencia de rivales en el proceso de análisis podría cambiar los plazos o, algo poco esperado, dejar sin efecto las negociaciones.
