No es novedad que en Brasil se comparte la infraestructura. Desde hace más de cuatro años se conocen pactos entre operadores para compartir infraestructura bajo diferentes modelos y sobre distintas bandas de espectro. Y esos acuerdos ahora están siendo renovados y ampliados.
Hace algunos meses se conoció que TIM y Oi compartirían infraestructura, en una movida que algunos pudieron haber leído como un primer paso para una posible y esperada fusión. Pero la realidad es que TIM parece intentar compartir lo más posible y con todos los actores del mercado, no sólo con quien espera poder fusionarse en un futuro.
Esta semana se conoció que TIM (Telecom Italia) y Vivo (Telefónica) firmaron un memorando de entendimiento para avanzar en nuevos acuerdos de infraestructura de red. Lejos de centrarse en nuevas tecnologías móviles como los últimos acuerdos signados a nivel mundial, el memorando de TIM y Vivo vuelve a las bases y prevé, entre otras cosas, compartir infraestructura en 2G bajo un modelo de Single Grid —lo que muestra que todavía queda mucha vida para la tecnología de segunda generación—.
El acuerdo también prevé el uso compartido de infraestructura de 700 MHz en ciudades con menos de 30.000 habitantes, lo que podrá ser expandido en el futuro para municipios de mayor población. Además, se analizarán oportunidades entorno al mantenimiento de infraestructura, la eficiencia energética y el alquiler de sitios.
Como segunda etapa, las empresas se comprometen a revisar oportunidades de compartir infraestructura en otras tecnologías como 4G, 4,5G o fibra óptica.
De acuerdo con las empresas brasileñas, el acuerdo permitirá mejorar los servicios a los usuarios y obtener eficiencias tanto en las inversiones como en los costos operativos. A partir de este acuerdo las empresas trabajarán para detallar el plan de compartición de infraestructura durante los próximos 90 días. Una vez concluido será elevado a las autoridades para su aprobación.