Telefónica ya dejó en claro que se desprenderá de todo lo que no considere fundamental para seguir operando. Esta estrategia admite infraestructura, concesiones, trabajadores y hasta filiales, además de una reorganización que incluye unos pocos mercados prioritarios y otros tantos postergados. La compañía ya escogió a la próxima víctima de su plan: busca interesados en Telefónica Educación Digital (TED).
Todavía no hay mayores detalles del movimiento, que fue confirmado por el portal El Español. La división funciona desde hace 15 años en España y hace unos años también en algunos países de Latinoamérica. Ofrece “soluciones integrales de aprendizaje online para la educación y la formación” y desarrolló proyectos con firmas como Allianz, Avianca, Cencosud y KPMG. Tiene una facturación anual en torno a los 10 millones de euros.
Adicionalmente la compañía lanzó un plan de bajas para los trabajadores con antigüedad hasta 10 años, según el mismo medio. Son dos nuevas propuestas dirigidas al departamento corporativo, que engloba a poco más de 1.140 personas. Los empleados que se adhieran recibirán compensación que incluye parte del salario bruto, pago diferido de rentas mensuales constantes y otros beneficios. El plan se emparenta perfectamente con el que desarrolla en España, con el que prevé ahorrar 220 millones de euros por año desde 2021.
Con el ojo puesto en reducir sus niveles de deuda y poder concentrarse en los negocios que sí le resultan vitales, la compañía sigue el curso de un plan que pronto encontrará una nueva víctima. Mientras suenan rumores que un grupo de millonarios está interesado en sus filiales de Hispanoamérica, Telefónica se quedó sin eufemismos para que suenen más amables sus bruscos movimientos en el último tiempo y ahora dice, de frente, que necesita ser ágil para lo que viene y hará lo que sea para lograrlo.
