El grupo Digicel busca luz verde por parte de sus titulares de deuda para poner en marcha un plan que le permitirá reducir ese ítem en unos 1.700 millones de dólares, estrategia que también repercutiría en una baja en los intereses anuales en el orden de los 130 millones de dólares. Si todos los potenciales implicados participan, la baja podrá reducir la deuda hasta 5.400 millones de dólares.
La reestructuración podrá implicar cambios en los tenedores de hasta el 49 por ciento de las acciones de la compañía, pues esos bonos convertibles que la empresa pone hoy sobre la mesa podrían convertirse en participación sobre una nueva compañía que quedará a cargo de las operaciones de la firma en Asia Pacífico, Latinoamérica y el Caribe, indicó el portal developingtelecoms.
“A pesar de años de inversión en redes e infraestructura y el sólido desempeño en los mercados, los niveles de deuda siguen altos. Esta acción es clave para bajar esos niveles”, indicó la compañía en un comunicado. Este movimiento, agregó, permitirá mayor flexibilidad para los próximos pasos de la compañía y le proporcionará mayor liquidez.
Digicel se suma así al listado de empresas que buscan la forma de reducir su deuda, con acciones como ésta, la venta de filiales o de activos no estratégicos, entre otros. Sus últimos movimientos estuvieron marcados por la intención de avanzar en un proceso de transformación digital de la mano de Lifecell (Turkcell). Ahora la urgencia tocó su puerta y busca mejorar su situación de la mano de una reestructuración, un término cada vez más frecuente en la boca de las empresas de telecomunicaciones.