Revisión de preponderancia de América Móvil se enfoca en el cumplimiento de las medidas anteriores

El Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) acaba de publicar nuevas medidas para América móvil en su revisión bianual de preponderancia. Sin demasiadas sorpresas —esta vez, no hubo grandes anuncios como la separación funcional—, las medidas vienen a acompañar un camino que ya se venía transitando desde el día que la compañía y sus subsidiarias fueron declaradas preponderantes.

La primera pregunta que surge en el mercado es si esta vez las medidas podrán ayudar a balancear un mercado mexicano aún muy concentrado. Pero la pregunta —y su premisa— tiene una trampa: en el mercado mexicano se ha visto desconcentración en algunos mercados mientras que, en otros, la posición dominante del agente preponderante es todavía muy importante.

“Como producto de estas acciones realizadas por el Instituto desde su creación, se reconfiguraron y crecieron los mercados” indicó el IFT en uno de sus documentos relacionados a la decisión. Allí, el regulador indica que la participación del agente preponderante cayó 23 puntos porcentuales en banda ancha fija desde 2013, al pasar del 73 por ciento al 50 por ciento al cierre de 2019. En banda ancha móvil, su participación se redujo once puntos porcentuales —allí es donde todavía detenta la posición más fuerte con 71 por ciento de mercado—, mientras que en telefonía fija disminuyó 19 puntos porcentuales entre 2013 y el segundo trimestre de 2020. En telefonía móvil la caída fue de seis puntos porcentuales hasta un 63 por ciento en el segundo trimestre de 2020.

Las nuevas medidas de preponderancia se pueden simplificar en los siguientes puntos, siguiendo el comunicado de América Móvil. En la parte fija, en términos generales se determinó: el uso de un Modelo de Costos Incrementales Promedio de Largo Plazo para determinar las tarifas del Servicio de Acceso Indirecto al Bucle Local (SAIB), así como que en dicho servicio el IFT podrá determinar zonas geográficas con competencia en las que dichas tarifas serían determinadas libremente por el agente económico preponderante; para el servicio de enlaces dedicados el IFT podrá determinar zonas geográficas y/o tipos de enlaces en competencia, para las cuales las tarifas se determinarían bajo una metodología de precios tope, y modificaciones operativas y de información al sistema electrónico de gestión (SEG) de los servicios mayoristas fijos.

En la parte móvil, las principales adiciones y modificaciones están relacionadas con detalles de información requerida para el análisis de la replicabilidad económica de las tarifas; reglas aplicables a la compraventa a plazos de equipos terminales por usuarios de Telcel; y la entrega de diversos nuevos reportes de información al IFT.

“Veo medidas positivas, como las que obligan a AMX a presentar las propuestas de ofertas públicas con base a las que están vigentes, además de justificar las modificaciones y ponerlas a consulta. El proceso de revisión por parte de la IFT hasta ahora ha sido muy complejo y consume muchos esfuerzos”, indicó Elena Estavillo, economista y excomisionada del IFT. “También lo relativo a las condiciones off-net on-net pueden contribuir a evitar prácticas competitivas, que cuando son perseguidas con base en la ley de competencia, generan procedimientos sumamente largos y complicados”, agregó.

El foco parece estar ahora puesto en el cumplimiento y la supervisión, para garantizar que medidas implementadas años atrás, ahora puedan cumplirse de forma eficiente. “Después de la separación funcional, que ha sido la medida más dura que hemos visto en el régimen de preponderancia, era lógico que las medidas siguientes estuvieran dedicados a revisar cumplimiento”, explicó Jesús Romo, analista de Telconomia. “Espero que esa sea una señal de que están renfocando las baterías hacia la supervisión, ya que ha sido el eslabón más débil. Creo que con todo, el marco de obligaciones desde un inicio ha sido bastante robusto, pero donde se ha debilitado es en la supervisión de cumplimiento y en los mecanismos específicos que han quedado para una regulación posterior, como por ejemplo la metodología de replicabilidad y la ejecución de la separación funcional”, añadió Estavillo.

Lo cierto es que el mercado mexicano parece todavía necesitar ajustes para emparejar el campo de juego. Los operadores que compiten con América Móvil en temas de movilidad así lo hicieron notar en las múltiples conferencias de las que han participado. Además, el mercado se siguió concentrando en espacios como la TV paga y banda ancha fija, donde Televisa empezó a cobrar mucha más fuerza y, luego de haber sido identificado como dominante, deberá de cumplir con regulación asimétrica. “La mejora en los servicios fijos ahora no estará tan ligada a la revisión de preponderancia sino a lo que se determine sobre la dominancia de Televisa”, indicó Romo.

No obstante, las medidas relacionadas con el cumplimiento y la transparencia en temas fijos podrían ayudar a apalancar el mercado y Romo espera que todo esto se traduzca en mejoras en la infraestructura de telecomunicaciones. “Esperamos que jugadores como Total Play sigan haciendo crecer su huella de fibra y aprovechen estos elementos de infraestructura intermedia (de América Móvil)”, agregó.

Romo también pone foco en los beneicios de todas aquellas medidas relacionadas a la protección del usuario, como la regulación de las promociones, para evitar costos indeseados para los usuarios. Incluso, señala que algunas de ellas deberían aplicarse a todos los operadores y no exclusivamente al preponderante.

Sin embargo, pone dudas sobre el impacto de las medidas sobre terminales, ya que los temas de contratos separados era algo que se venía implementando en el mercado. Además, existen factores que las amortiguan, como el hecho que el mismo grupo de América Móvil cuenta también con tiendas de retail y bancos, lo que les permite mayor flexibilidad que sus competidores en todo lo relacionado a la comercialización de equipos. Lo que sí ve interesante son las medidas que indican el desbloqueo de terminales adquiridos cuando los usuarios cancelen el contrato por el servicio de telecomunicaciones, siempre que hayan transcurrido por lo menos seis meses de contrato de equipo. “Ya los operadores no podrán beneficiarse de plazos ultralargos para retener clientes, aunque puede ser una medida sujeta a desafío legal porque el operador se queda sin la posibilidad de prevenir morosidad”, explicó Romo. La impugnación de este y otros artículos es un tema que ya está sobre la mesa, luego que América Móvil indicara en su comunicado que la revisión de las medidas de preponderancia “será impugnada en su momento conforme a las leyes aplicables”.

“América Móvil considera que, nuevamente, la resolución del IFT no se basa en una evaluación integral en términos de competencia de los diferentes mercados que conforman el sector de telecomunicaciones, no considera los profundos cambios ocurridos en el sector de las telecomunicaciones a seis años de la imposición de medidas asimétricas ni la competencia efectiva existente tanto en servicios fijos como móviles”, indicó la compañía en un comunicado. Como suele ocurrir con este tipo de cuestiones, las medidas no logran conformar a todos los actores y, mucho menos, a quien es objeto de las obligaciones.

Si bien las nuevas medidas muestran un avance positivo en temas de cumplimiento, que podrían derivar, en el mejor de los casos, en movimientos de desconcentración de mercado, todavía quedan temas pendientes e importantes por resolver. Por ejemplo, para Elena Estavillo la obligación de que América Móvil entregue a IFT los contratos entre los mismos integrantes del agente económico parece una medida ineficaz “pues deja en manos del regulador la comparación minuciosa de condiciones, algunas de las cuales muchas veces no se consignan por escrito”. “Lo ideal es que estas condiciones sean transparentes para todos los operadores, de forma que ellos puedan exigirlas y comprobar en el día a día que reciben el mismo trato”, agregó. También apunta a modificar las reglas de replicabilidad, un mecanismo que la especialista considera ineficaz.

Lo cierto es que con estas medidas IFT suma avances hacia el objetivo de balancear el campo de juego. Ahora, parte de la discusión pasará a las medidas de dominancia de Televisa, con las que el regulador buscará también mejorar las condiciones de competencia. El foco esta ahora puesto en el cumplimiento de unas medidas que ya llevan algunos años en los papeles.

Leticia Pautasio es periodista y Licenciada en Comunicación Social por la Universidad Nacional de Quilmes (Buenos Aires, Argentina). Durante su carrera profesional se desempeñó en gráfica, radio y medios de comunicación en línea. Desde 2009 se especializa en tecnología, telecomunicaciones y negocios; cubriendo la realidad del sector en América latina. En 2013 obtuvo el diplomado "El Periodista Latinoamericano como agente y líder en el desarrollo social" del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (México). Contacto: [email protected]

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